El régimen de Nicaragua ha enviado su respuesta a la Corte Suprema de Justicia sobre la petición de extradición del expresidente Mauricio Funes Cartagena, diciendo que él es un asilado, más no dice si lo extraditará.
“En realidad Nicaragua solo dice que está asilado pero no dice que rechaza la extradición”, afirmó el magistrado de la Corte Surema de Justicia, Óscar López Jerez.
La respuesta será remitida al Juzgado Séptimo de Instrucción de San Salvador, añadió el magistrado.
La solicitud de El Salvador para extraditar a Funes parte de que él es reclamado por tribunales por delitos de corrupción en perjuicio del Estado salvadoreño.
La respuesta de Nicaragua llega dos semanas después de que la Corte Suprema ordenó tramitar la solicitud de extraditar a Funes, quien enfrenta cuatro procesos judiciales, tres de ellos por cargos penales. Se le acusa de delitos de peculado, negociaciones ilícitas e instigación a peculado, además de cohecho (soborno).
A Funes le responsabiliza la Fiscalía General de la República de haber presidido una estructura delictiva mientras fue presidente del país entre 2009-2014, mediante la cual extrajo un total de $351 millones de fondos públicos a través de la partida de Gastos Reservados, más conocida como partida secreta.
Por ese caso, denominado “Saqueo Público” por el Ministerio Público, es que se le está reclamando a las autoridades nicaragüenses.
López Jerez dice que él no está de acuerdo con la respuesta de Nicaragua, “porque los delitos por lo que lo requerimos no son políticos, sino comunes”.
En septiembre de 2016 el régimen de Ortega otorgó asilo político al expresidente Mauricio Funes, su compañera de vida Ada Mitchell Guzmán y a tres de sus hijos.