Adolfo Rivas Barrios, de 43 años, estuvo tres años al frente de la alcaldía de Nejapa por el partido FMLN. En mayo culmina su gestión y pasa a formar parte del concejo municipal. Dice sentirse orgulloso de lo hecho en estos tres años y asegura que no tuvo mayor dificultad durante su gestión.
Para él, Nejapa es una esperanza porque es uno de los pocos municipios con riqueza hídrica, tanta que incluso es compartida con otros municipios aledaños. Además, considera que es "bastante seguro" para sus pobladores.
Su despacho es amplio, pero también funciona como una pequeña sala de reunión. Sin embargo, no es el espacio y orden de los muebles lo que capta la atención, sino un estante de madera pegado a una de las paredes y desbordante de todo tipo de sombreros.
Los sombreros de palma, tela, algodón, poliéster... de copa alta, pequeña, redonda y ovaladas son alguna de las figuras que destacan en el mueble de madera. Su pasión por la colección de sombreros comenzó hace 20 años cuando estudiaba en la Universidad EARTH de Costa Rica y cursaba la ingeniería en agronomía.
"Tuve la dicha de estudiar en un ambiente multicultural donde nos reuníamos de 40 nacionalidades y cada quien llevaba un sombrero o atuendo que tal vez le recordaba su país, ahí nació un poco la afición por los sombreros", cuenta.
Relató que al regresar a El Salvador traía consigo el sombrero con la identificación de la Universidad EARTH y otros típicos de Costa Rica que intercambió con sus compañeros.
Ahora tiene más de 53 sombreros de 16 países diferentes porque al viajar lo primero que busca es el sombrero más representativo o que identifique la zona que visita. Asegura que sus favoritos son los de palma porque "son frescos, más útiles y protegen más del sol".
Rivas cuenta que su gusto por los sombreros también fue heredado por su padre, puesto que él siempre los usó y de pequeño al ir a trabajar a los cañales le exigía su uso.
""Mi padre siempre fue un campesino y siempre usaba sombrero. Él nos obligaba a usarlos cuando trabajamos en los cañales, para él no fue una opción durante la niñez, 'era ponete el sombrero y se acabó'", dice.
En la cotidianidad del nejapense nunca falta este artículo, incluso tiene los designados para eventos formales o reuniones. De El Salvador, los sombreros que prefiere son los hechos en Cojutepeque y Nahuizalco.
"Me encantan las hormigas"
Otra de las peculiaridades de Rivas es su gusto por las hormigas y también es una de las temáticas decorativas de su despacho. En su escritorio tiene hormigas de juguete de plástico y hule en diferentes tamaños. También tiene otras que han sido forjadas en hierro y complementadas con piedras, lo que las hace un poco pesadas.
Además, tiene hormigas pintadas en cuadros, pero, ¿por qué el interés en estos insectos tan comunes y molestos para la mayoría de personas?, él responde:
"Me encantan las hormigas, son símbolo de trabajo, equipo, el amor por las hormigas lo tengo desde que fui a la universidad al curso de entomología. Yo hubiese querido ser entomólogo, pero no se pudo", lamenta.
La entomología es el estudio científico de los insectos y a él le hubiese encantado estudiar estos seres vivos.
¿Qué hará después de salir de la alcaldía?
Ahora que Jorge Escamilla, de Nuevas Ideas, asuma la alcaldía del municipio, Rivas será parte del concejo municipal, pero también tiene otros proyectos personales que llevará a cabo. Entre ellos, la creación y comercialización de un producto orgánico para el control de plagas hecho del árbol de Nim (Azadirachta indica).
"Queremos ver si producimos un producto orgánico para el control de plagas, natural no pesticida convencional. Vamos a incursionar en la agro industria", dijo.
Explicó que el proceso es relativamente fácil y se trabaja con la semilla de este árbol: "Esa semilla se echa en alcohol, se fijan los componentes, salanina se llama el componente del nim, y en lugar de usar un insecticida tóxico, mejor se utiliza eso, tiene el mismo efecto".
Aseguró que la semilla debe de dejarse tres o cuatro días en alcohol para la fijación. El nombre de este insecticida natural será America Trópical y Rivas espera que esté a la venta en seis meses.
El nim es considerado el árbol ideal para un control biológico de plagas y enfermedades en los cultivares agrícolas y granjas pecuarias. Crece en todas las regiones de El Salvador y es promisorio para reforestar terrenos áridos en los cuales fracasan otras especies.
El extracto de sus semillas y hojas es muy eficaz para controlar diferentes plagas que afectan a los vegetales, y además las garrapatas en bovinos, los ácaros causantes de la sarna cunícula y porcina, las larvas de los mosquitos Aedes y Anopheles son sensibles al nim.
