Horas después de que Estados Unidos confirmó que el gobierno de Nayib Bukele negoció con pandillas y después de designar bajo la Ley Magnitsky a los funcionarios Osiris Luna y Carlos Marroquín por haber encabezado estas negociaciones, el presidente salvadoreño reaccionó, tildándolo de "mentira".
En un breve hilo en Twitter, el mandatario desestimó los señalamientos del gobierno de Estados Unidos, pero no mencionó a ninguno de sus funcionarios ahora sancionados.
"¿Celulares y prostitutas en las cárceles? ¿Dinero a las pandillas? ¿Cuándo pasó eso? ¿No revisaron ni la fecha? ¿Cómo pueden poner una mentira tan obvia sin que nadie se las cuestione? Hay videos sí, pero de sus amigos haciendo eso. No nosotros. Ya ni disimulan", tuiteó Bukele.
Asimismo, aprovechó el hilo para confrontar nuevamente con la embajada de Estados Unidos y arremeter contra la ex encargada de Negocios, Jean Manes. El presidente dijo que la última vez que se reunieron fue el 16 de septiembre y ella siguió buscándolo, pero él no le contestó más.
Además, Bukele decidió hacer pública una supuesta reunión y peticiones que le habría hecho Manes, a manera de justificar los señalamientos que le hizo Estados Unidos a sus altos funcionarios.
“En nuestra última reunión, la ex encargada de negocios de EEUU, Jean Manes, me pidió 4 cosas: 1. La liberación de Ernersto Muyshondt; 2. La no reelección del Fiscal General Rodolfo Delgado; 3. El compromiso no tocar a dos personas: Alfredo Cristiani y Douglas Meléndez”, escribió en un primer tuit publicado esta tarde de miércoles.
En otro tuit explicó como punto 4 que también Manes, presuntamente, le habría solicitado detener los arrestos de las personas implicadas en los sobresueldos.
Sin embargo, el mandatario no da respuesta certera a los señalamientos que hace el gobierno de Estados Unidos en contra de Luna Meza y de Marroquín. Según el Departamento del Tesoro de Estados Unidos, ambos funcionarios “dirigieron, facilitaron y organizaron una serie de reuniones secretas en las que participaron líderes de pandillas encarcelados”. Además, se sancionó a la madre de Osiris Luna por ayudar a su hijo en un esquema de corrupción.
Según una publicación de la Embajada Americana en San Salvador, Luna y Marroquín están siendo designados por ser funcionarios de gobierno que son “responsables de o cómplices en, o se han involucrado directa o indirectamente en corrupción”.
Como resultado de estas designaciones, el Departamento del Tesoro informó que bloqueará todas las propiedades e intereses en Estados Unidos pertenecientes a Luna, Meza o Marroquín.
“Osiris Luna Meza (Luna) y Carlos Amilcar Marroquín Chica (Marroquín) dirigieron, facilitaron y organizaron una serie de reuniones secretas en las que participaron líderes de pandillas encarcelados, en las que se permitió que pandilleros conocidos ingresaran a las instalaciones penitenciarias y se reunieran con altos mandos de la pandilla. Estas reuniones fueron parte de los esfuerzos del Gobierno de El Salvador para negociar una tregua secreta con los líderes de las pandillas”, sostiene el Departamento del Tesoro.
Pero Bukele no se refiere a los señalamientos directos en contra de sus altos funcionarios, sino que asegura que la Ley en contra de la cooperación internacional fue posterior a la última comunicación que tuvo con Manes, “por lo que nunca recibí una solicitud directa al respecto; pero sí nuestra Canciller, a quien le exigió detener su aprobación, so pena de perder toda la ayuda internacional”, asegura.
Después de arremeter en contra de Manes y revelar supuestas peticiones de la ex diplomática en El Salvador, Bukele hizo pública en su cuenta de Twitter una reunión sostenida ayer martes con el actual Encargado de Negocios de la Embajada de EE.UU. Brendan O’Brien, a quien dice que le manifestó que, “a pesar de todo, El Salvador seguía interesado en reparar la relación, ofreciéndole toda la cooperación posible”.
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