Mujeres son las más afectadas cuando desaparece un pariente, asegura comité de búsqueda

El 90 por ciento de mujeres con algún pariente desaparecido, ya sea hijo, esposo, hermana o hermana, no abandonan el esfuerzo de continuar en la búsqueda.

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Karen y Eduardo desaparecieron el 18 de septiembre, de la colonia Quezaltepec, Santa Tecla. Foto EDH / Yessica Hompanera

Por Jorge Beltrán Luna @Jbeltranluna_

2021-11-23 9:43:41

Las mujeres son las más afectadas con la desaparición de algún familiar, ya sean estos hijos, compañeros de vida, hermanos u otro pariente, asegura el Comité de Familiares de Personas Desaparecidas por la Violencia en El Salvador (COFADEVI).

Trinidad Mónico, dirigente del comité humanitario, señaló que en el 90 por ciento del total de los casos de desaparecidos, las mujeres son las que no abandonan los esfuerzos por localizar a su familiar desaparecido, ya sea que lo encuentren con vida o sin vida.

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Mónico asistió al lanzamiento de la “Ruta para la búsqueda de personas desaparecidas en El Salvadora causa de la violencia”, promovido por el Comité Internacional de Cruz Roja (CICR).

A lo anterior se le suma que las mujeres ven incrementadas sus responsabilidades económicas en sus hogares cuando, por ejemplo, se trata del padre de familia el que está desaparecido y quien era el que llevaba el sustento de la familia. Hay casos en los que las mujeres han perdido sus empleos por dedicarse a buscar a sus parientes.

En la mayoría de los casos, las mujeres tienen que recurrir a los préstamos para poder financiar la búsqueda de sus parientes y también para poder saldar las deudas adquiridas por el familiar desaparecido, señaló Mónico. El deterioro de la salud física y mental es otro de los problemas que enfrentan, señaló.

“Muchos casos están archivados (en Fiscalía). Dicen que van archivar el caso porque no hay actualización de información...cuando le dicen esto a una madre se enferma... No existe igualdad”.

Trinidad Mónico, .

Mélida Nieto es una de esas madres que buscan a sus hijos. Ella viaja desde Quezaltepeque a varios pueblos con la fe de hallarlo.

Agregó que cuando existe la desaparición de un familiar, en especial la de un ser querido, las mujeres y su grupo familiar se vuelven más vulnerables ante los riesgos que se presentan en la búsqueda de sus parientes porque son extorsionadas y hasta amenazadas.

El problema se agrava cuando algunas de ellas pierden sus casas siendo víctimas de desplazamiento forzado; o cuando las abuelas han tenido que asumir la responsabilidad de ser madres en los casos cuando la madre es la desaparecida, de acuerdo a Cofadevi.

Otras de las situaciones adversas que enfrentan las familias y en especial las mujeres, es cuando la Fiscalía General decide archivar los casos de sus parientes desaparecidos sin antes consultarles si están de acuerdo o no.

Mónico señaló que existen muchos casos que tienen entre tres y hasta 10 años de que la víctima desapareció, sin que se haya tenido información de algún avance de parte de las autoridades.

Otro de los problemas graves que también enfrentan los familiares es que los investigadores de la Policía les exigen que les lleven información para poder agilizar las investigaciones, cuando son ellos los responsables de investigar y obtener las evidencias necesarias para esclarecer los casos, aseguró.

Según el comité, en buen número de procesos, los fiscales señalan que se va a archivar el caso porque no hay actualización de información. “Lo grave es que cuando le dicen a una madre que el caso está archivado, ellas se enferman y su vida se pone en peligro”, dijo Mónico.

Agregó que el cambio de fiscales o de investigadores de los casos de desaparecidos también retrasan las investigaciones y alargan la angustia de las víctimas.

“No hay igualdad de condiciones, porque cuando se trata de casos mediáticos queda demostrado que hay respuesta inmediata de parte de las autoridades”, denunció Mónico. Agregó que “vemos diferentes actuaciones en las sedes fiscales por lo que es necesario a tener empatía, a humanizarse, solidarizarse con las familias para que sean atendidas en igualdad de condiciones”.