Francisco Alabí, ministro de Salud, ha dado un giro total a su discurso en cuanto a la presencia de la variante ómicron en El Salvador, lo que deja en evidencia una clara contradicción del funcionario público en cuanto al manejo de la pandemia por covid-19 en el país.
El martes, Alabí dijo ante los medios que "no existe identificado en el momento en el país ómicron", y previamente comentó en la entrevista Frente a Frente de TCS que no se podía confirmar "oficialmente" que esta mutación de covid-19 ya estaba en el país, y que todavía estaban recolectando muestras para enviar a un laboratorio de Panamá, con la espera de tener respuesta "dentro de dos a tres semanas".
Pero, en cuestión de un día, la mañana de este miércoles el funcionario admitió que sí hay evidencia de que "clínicamente tenemos la presencia de ómicron" ya en El Salvador.
Además, siempre el miércoles Alabí agregó que, en realidad, el Ministerio de Salud está consciente de que ómicron está en el territorio salvadoreño desde diciembre de 2021... algo que negaba en conferencia pública con los medios el 29 de diciembre del año pasado.
Te puede interesar | Viajeros de fin de año pudieron facilitar ingreso de ómicron a El Salvador
En dicha fecha de finales de 2021, el ministro expresó que "evidentemente hay una disminución importante (de casos) que nos permite liberar el Hospital El Salvador, el principal hospital de referencia para pacientes covid, para poder ampliar y prepararnos ante las atenciones necesarias de la población de casos por covid-19".
Las contradicciones expresadas por el ministro Alabí provocaron una serie de críticas entre la ciudadanía y también desde la comunidad médica nacional, sobre todo porque especialistas como los infectólogos Jorge Panameño e Iván Solano Leiva alertaron que desde el 20 de diciembre era evidente que los casos ya venían al alza, en un comportamiento que señalaba a la presencia de ómicron, por lo que desde entonces pidieron que el Ministerio de Salud hiciera mayor vigilancia genómica entre los casos positivos, pero no fue así.
El oncólogo y epidemiólogo salvadoreño Roberto Vidrí publicó en Twitter lo que identificó como la "estrategia" por parte del Ministerio de Salud: "negar situación epidemiológica, no escalar capacidad de pruebas (igual a) no documentar exceso de caos; decir que somos ejemplo mundial", en el marco de que "la mayoría (vacunados) no necesitarán cuidados hospitalarios. Esto, sacrificando y exponiendo a los no vacunados. Vergüenza", y luego etiquetó al ministro Alabí y a su cuenta en la red social.
Se sumó a los señalamientos el doctor Wilfrido Clará, también especialista en epidemiología, quien escribió en Twitter que "no hace falta ser docto en la materia para darse cuenta que lo que está en curso actualmente en El Salvador es una cuarta ola pandémica, con toda seguridad debido a la variante ómicron, y no una simple 'anormalidad estadística'. Es cuestión de simple sentido común y epidemiologia básica", a pesar de la postura de negación de ómicron que mantenía Alabí.