Durante los cruentos años de la guerra en El Salvador, miles de salvadoreños emprendieron el viaje a Australia buscando un refugio para sus familias.
Los compatriotas salieron huyendo debido al riesgo que representaba vivir en un país en conflicto y por la crisis económica provocado por la guerra. El mayor éxodo de salvadoreños ocurrió en a mediados de la década de los 80.
En aquellos años fue la Organización Internacional de la Migración (OIM) la que promovió el refugio de salvadoreños en varios países, entre ellos Australia, Canadá, Suecia, Suiza, España y en menor proporción en Francia.
Ese fenómeno migratorio ha impactado en la política y en la economía de El Salvador.
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De acuerdo a datos del gobierno salvadoreño en 2006, el 32 % de los salvadoreños vive en Melbourne, el 21 % en Brisbane y el 18 % en Sídney. Y estimaba que alrededor de 19 mil connacionales habían emigrado a Australia.
Según un censo realizado en Australia en 2011, el 25 % realizaba labores gerenciales o profesionales. El 23 % se emplea en la producción, el transporte y las operaciones y el 20 % son trabajadores.
Muchos migrantes de El Salvador son trabajadores calificados, pero su falta de inglés les ha obligado a aceptar trabajos no calificados. Más del 92 % todavía hablan español en casa, y la mayoría son católicos, aunque hay comunidades evangélicas en crecimiento., indican datos del censo.