Un indigente en estado de ebriedad murió esta tarde tras ser atropellado por un camión que transportaba sacos de harina para hacer tortillas sobre la calle Castillo, entre la 18 y 20 avenida Sur, en el centro de la Capital.
La víctima no fue identificada por las autoridades, ya que no portaba documentos personales. Sin embargo, sus amigos de chupa dijeron que solo sabían que se llamaba Mauricio.
Según testigos, Wicho, como le decían de cariño, se encontraba sentado sobre un asiento viejo de carro, cuando intentó levantarse, perdió el equilibro y cayó a la calle justo cuando pasaba el camión.
Las llantas traseras del camión le pasaron encima en parte del tórax y la cabeza, dijo una fuente policial.
Efraín, quien era su amigo desde hace 20 años, relató que para tener ingresos le hacían mandados a "las muchachas" (prostituta de la Avenida Independencia). Por cada mandado que hacían les pagaban $0.25, dinero que les servía para comprarse un trago y un par de pupusas.
"Hey loco me salió una corita, ya vengo", fue lo último que le dijo Efraín a su amigo luego de tomarse la mitad de una botella de guaro que les regalaron.
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Mauricio tenía cuatro días de haber regresado de un centro de rehabilitación para alcohólicos, dijo el 29, como es conocido Efraín.
"Hace como 10 días se lo habían llevado a un centro de rehabilitación, pero se regresó", añadió.