La inesperada visita de Nayib Bukele a la plaza central del caserío El Mozote, en Meanguera, Morazán fue tomada con incertidumbre por varios de los pobladores; debido a que el presidente, luego de tres años en la presidencia y de varias promesas de reparación a las víctimas sobrevivientes de la guerra y sus familiares, aún no ha cumplido con lo dicho una semana antes de tomar posesión de su cargo.
Sin embargo, esta vez, ya anunció nuevos proyectos en la zona tales como una plaza memorial, un CUBO y un anfiteatro que costarán $32 millones de dólares.
Pero las víctimas sobrevivientes y sus familiares que no gozan de una compensación económica digna, luego que el gobierno de Salvador Sánchez Cerén vía decreto ejecutivo concediera una pensión de entre $15 y $50, esperan algo más que un CUBO para actividades lúdicas. Las necesidades de las familias continúan estando ligadas a la salud y a la economía.
En la ceremonia para conmemorar los 40 años de la masacre de El Mozote y lugares aledaños, en la que fueron asesinadas 986 personas, entre ellos 552 niños, las víctimas y líderes opinaron sobre los recientes anuncios del presidente, y si las medidas impulsadas cumplen con aspectos como la justicia, la verdad, la reparación del daño y las medidas de no repetición.
“Ayer botaron la comunal. Eso no está bueno lo que hicieron. Ahí hacíamos fiestas y nos daban comida ahí. Eso no está bueno para mí”, expresó María Magdalena Díaz, de 78 años, quien agregó que ella no recibe pensión compensatoria pese a que tres de sus familiares murieron en varias masacres.
Para Díaz urge más la atención psicológica, física y económica de las víctimas sobrevivientes y sus familiares. Los proyectos ofrecidos por Bukele no reparan la situación vulnerable en la que se consciente que vive. “De no ser por un exalcalde yo no tuviera casa. Él me construyó una champita aquí”, dijo.
La construcción del CUBO implica la destrucción de la Casa Comunal de El Mozote, algo que ya inició y que removió a vendedores de artesanías de la zona.
Mientras tanto, el presidente de la Asociación Promotora de Derechos Humanos de las Víctimas de El Mozote, Leonel Tobar, consideró que muchos de los anuncios que hizo Bukele son los mismos que hizo hace unos años. “Hemos tenido construcciones de calle, pero fueron antes de 2019. La construcción de la escuela ya estaba terminada en 2019. La casa del adulto mayor también estuvo antes. Creemos que de promesas a la realidad tenemos un 5 % cumplido”.
Tobar dice que Bukele hace acuerdos comunitarios y no acuerdos que resarcen el daño sufrido por las víctimas sobrevivientes y sus familiares. “Son acuerdos que toma con la ADESCO. Nosotros estamos de acuerdo con el desarrollo, pero el desarrollo no depende solo de una comunidad. Tenemos más de siete comunidades que se merecen igual reparación que la que tiene El Mozote”, dijo.
Una postura con la que coincidió Rosario López, sobreviviente de La Joya, caserío aledaño al Mozote. “Yo quisiera que en La Joya se dieran estas obras. Pero allá no llegan a pesar de las gestiones. Le he mandado varias cartas al presidente y nada”.
Exjuez: Bukele es el que más ha encubierto la verdad de El Mozote
"(Bukele) viene a prometer y pasa un año, dos años, tres años y las promesas siguen siendo las mismas. Además, no vemos la lógica en demoler lo que teníamos. Lo más lógico es que el Estado buscara otro espacio donde construir lo que está prometiendo", finalizó Leonel Tobar.