“¿Por qué yo?”, “¿Por qué a mi edad?”, “No hay historial en mi familia”, “¿por qué me pasa esto?”. Fueron solo algunas de las preguntas que cruzaron por la mente de María José Castro, tras ser diagnosticada a sus 22 años con carcinoma papilar invasivo grado 3, un tipo de cáncer de mamaque medicamente aparece en la mujer después de los cuarenta o los cincuenta años, poco frecuente, a temprana edad, como le sucedió a María José.
De acuerdo con el Dr. Leandro Rodríguez, en el año 2018, el Hospital Nacional de la Mujer, cerró con aproximadamente 30 pacientes menores de 30 años con cáncer de mama, y este año, ya se registran, hasta la fecha 10 pacientes menores de 30 de años.
En dicho hospital se atiende a un 80% de pacientes con cáncer de mamá a nivel nacional. Majo, como cariñosamente le llaman, entró en el reducido grupo de casos con cáncer de mama a temprana edad.
Fue en 2017, justo cuando empezaba su proceso de grado en la universidad y después de consultar por un bulto que se encontró en el seno cuando se autoexaminaba, que se enfrentó a una dura realidad, además de llevar la carga académica para lograr graduarse, debía de luchar contra un cáncer invasivo.
El proceso indudablemente no le fue fácil, en la carrera por llegar a la meta de uno de sus sueños personales, se encontró con un obstáculo, que por un momento nubló su camino, pero no le quitó su valentía para enfrentarse al difícil diagnósticoy lograr graduarse de licenciatura en Relaciones Públicas y Comunicaciones, con especialización en Diseño Gráfico.