El Lago de Coatepeque, en Santa Ana, cambió de color por segundo año consecutivo, indicó el Ministerio de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Marn).
La entidad consignó que técnicos de la Unidad de Humedales realizaron mediciones físico-químicas al cuerpo de agua, que mostró una floración de cianobacterias filamentosas dispersas. Las mismas son visualizadas como extensos parches de color pardo.
El ministerio recibió una denuncia ciudadana que indicaba que desde el 23 de enero se comenzó a observar una gran cantidad de material vegetal de color café pardo.
Pero desde la semana pasada, el material comenzó a concentrarse en grandes núcleos hasta ser visible y disperso en todo el espejo de agua.
El primer cambio de color de agua a pardo se registró el 15 de mayo de 2018.
El encargado del área de Humedales del Ministerio de Medio Ambiente, Jaime Espinoza, expresó que el tipo de proliferación desmedida de algas acuáticas no es la misma situación que genera el cambio a tonalidad turquesa.
“Esta situación es producto de los vientos nortes registrados en enero, que removieron nutrientes de las capas de agua profundas. Dichos nutrientes favorecieron el crecimiento de las poblaciones de cianobacterias en grandes cantidades”, explicó.
Rescatan a delfín que quedó varado en la Costa del Sol
La acción de los lugareños ayudó a que en esa ocasión el delfín pudiera ser devuelto al mar.
La floración de algas podría continuar durante los próximos 15 días, que es el tiempo aproximado de vida de estas algas y si las condiciones del tiempo (sin vientos) se mantienen estables.
El experto recomendó que no se consuma el agua del lago debido a que por la cantidad de algas filamentosas, se hace imposible separar los grumos de cianobacterias del agua y limita su calidad.
La situación también ha generado que 1,100 familias se queden sin agua, ya que las algas han tapado las bombas que extraen el recurso para el consumo de la población.