El Juzgado Primero de Instrucción de San Salvador resolvió la tarde de este jueves enviar a juicio a la exfiscal Rosa Ligia Orellana Salazar por cinco casos de peculado o apropiación indebida de más de $21,000 en cinco casos en los que fueron detenidos supuestos traficantes de personas o más conocidos como Coyotes.
Aunque la exfiscal Orellana Salazar fue acusada de incumplimiento de deberes e infidelidad en la custodia de documentos públicos, el juez consideró que esos delitos están contemplados en peculado, por eso consideró innecesarios acumularle esas figuras delictivas.
El juzgador hizo mención a cada uno de los casos en que la exfiscal despojó a los supuestos coyotes de sumas que van desde los $1,178 a $11,000 en efectivo.
Los hechos que se le imputan a la exfiscal Orellana Salazar fueron cometidos entre 2014 y 2016 en diferentes procedimientos, algunos en San Salvador, Santa Ana, Cuscatlán y Usulután.
Curiosamente, los imputados en los procesos judiciales que concluían con el juicio eran absueltos por faltas de pruebas contundentes en su contra, luego éstos reclamaban la devolución de los miles de dólares que se les había sido decomisado en sus capturas.
Orellana Salazar les ofrecía una serie de evasivas a los imputados y éstos tenían que recurrir a los jefes de la fiscal, Auditoría Fiscal y finalmente, iniciaban el proceso de acusación penal en su contra en la Fiscalía.
De modo que en junio de 2017, mientras la exfiscal se encontraba en una capacitación en la Escuela de Formación Fiscal de la Fiscalía, le leyeron la orden de detención. Ya fue a audiencia inicial y en la preliminar de ahora fue enviada a juicio para rinda cuenta a un tribunal sobre su supuesto mal proceder con los fondos que decomisaba a los imputados.
Fiscalía ha ofrecido el testimonio de las víctimas, el de sus abogados, el de la jefa de la unidad fiscal a la que pertenecía, su colaborador a quien supuestamente mandaba a retirar el dinero en custodia en la Policía Científica y otros documentos más.