El salvadoreño Vernon García Rivas se incorporó al equipo de científicos del laboratorio de Investigación en Psiquiatría Molecular, de la Escuela de Medicina de la Universidad de Yale, Estados Unidos para desarrollar un estudio sobre la neurobiología de las adicciones a las drogas.
De acuerdo con Vernon García, su investigación está enfocada en cómo el estrés predispone al consumo del alcohol particularmente en mujeres.
“Existe amplia evidencia que las mujeres tienden a tomar más para aliviar el estrés, comparado con hombres”, aseguró a El Diario de Hoy el científico salvadoreño.
García expone que de hecho, este es un tema que se está volviendo tendencia, ya que con el COVID-19 ha aumentado el estrés e incertidumbre, tanto que pone a muchas personas en riesgo a desarrollar alcoholismo.
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“Mi proyecto, que se basa en un modelo en roedores, tratará de entender qué partes del cerebro se ven implicados en la intersección entre el estrés y el consumo del alcohol”, explica el salvadoreño.
Entendiendo los mecanismos biológicos, es posible desarrollar tratamientos específicos para individuos vulnerables a tomar alcohol para aliviar estrés, según García Rivas.
El salvadoreño se incorporó recientemente al equipo de científicos para iniciar el proyecto de investigación, sin embargo por la pandemia y las restricciones por COVID-19 lo hace de forma remota el 50% del tiempo.
Amor por la ciencia
Su pasión por la ciencia, especialmente por lo químico biológico nació después de participar en proyectos de su escuela, pero uno que marcó su interés por ese campo fue cuando recolectó agua del río Acelhuate y realizó un análisis físico, químico y biológico.
Tras despertar interés por la investigación, Vernon comenzó sus estudios de Química y Farmacia en la Universidad de El Salvador, pero a los meses ganó una beca Fantel y estudió por cuatro años licenciatura en farmacología, en Australia, donde se graduó con honores.
Regresó a El Salvador, trabajó en la industria farmacéutica, en el ministerio de Salud, y fue docente de la Universidad Alberto Masferrer, sin embargo quería seguir especializándose en el campo científico y ganó otra beca con la Unión Europea, para estudiar neurociencias.
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Con dicha beca hizo un doble máster, el primer año lo estuvo en Alemania y el segundo año en Francia, donde lo invitaron a quedarse un año más para realizar un doctorado.
“Desde pequeño, mis papás siempre me incentivaron a soñar alto, a prepararnos, la primera beca fue motivada por mis papás y la escuela, pero al vivir en el exterior, uno se da cuenta que hay un sinfín de oportunidades, que se pueden aprovechar con solo tocar puertas”, reflexionó el salvadoreño.
“Estudiamos por un gran esfuerzo (de sus padres) para mantener el pago de la colegiatura, con media beca, ellos tuvieron la visión que podíamos llegar lejos si queríamos”, aseguró.
Vernon cuenta que tras la experiencia que tuvo en su doctorado, empezó a hacer contacto con algunas personas en Twitter, incluso fue la vía por la que aplicó para ingresar al laboratorio de la Universidad de Yale, lugar donde logró ser aceptado tras una serie de procesos de admisión.