Henry Salazar, condenado a 50 años por feminicidio, se fue a un bar y a un concierto después de asesinar a su pareja embarazada
Salazar salió a festejar momentos después de matar a su pareja y a su bebé de ocho meses que llevaba en su vientre. El Tribunal lo condenó a 50 años de cárcel.
Consta en el expediente judicial que Henry Alberto Salazar Burgos, luego de acabar con la vida de su pareja y su bebé, que la madre llevaba en su vientre desde hacía ocho meses, en Olocuilta, La Paz, se regresó en su vehículo blanco a San Salvador para reunirse con un amigo en un bar. Quería departir unas copas, pero no bastó eso y más noche se fueron a un concierto.
El feminicidano lucía nervioso, impresionado o confundido por lo que había hecho, más bien lucía como que había resuelto uno de sus problemas. Esto se ventiló en el juicio en el que a Salazar Burgos fue condenado a 50 años de prisión por feminicida.
Y ese mismo comportamiento presentó esta mañana de martes cuando recibió una de las sentencias más grandes, no mostró la mínima preocupación o reacción por el futuro que le esperaba como suele suceder con otros criminales que lloran, suspiran profundo y se estremecen.
En el transcurso del relato conmovedor en el que se detallaron sucintamente los hechos que acabaron con la vida de su pareja y su hijo, Salazar Burgos tampoco se vio algún signo de remordimiento. Su mirada siempre permaneció fija hacia la jueza sin hacer el mínimo gesto por lo que decía.
Por el contrario, la jueza por un momento tuvo que interrumpir la lectura de su fallo al verse conmovida por la magnitud de los hechos.