Caminar en la carpintería de Francisco Hernández, localizada en Ciudad Delgado, crea la percepción de estar en un universo diferente, en el cual los visitantes son seres gigantes y los locales personas bajitas, casi miniatura.
Se trata de un singular taller, en el cantón San José Cortez, donde son elaborados roperos, jugueteras, módulos para salas y gaveteros, todos de dimensiones tan pequeñas que fácilmente se pueden colocar en la palma de la mano.
Francisco explicó que comenzó a trabajar en pequeño hace 15 años, después de una evaluación económica de su negocio donde se percató que podía optimizar aún más la madera y hasta utilizar los “desperdicios”.
“Era plata, mucha plata (dinero) la que se tiraba a la basura o se quemaba, al entender eso se comenzó a ver qué otros productos se podían elaborar”, comentó Francisco, quien es carpintero desde hace más de 40 años.
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Así comenzó la elaboración de los muebles con dimensiones que se miden en pocos centímetros y pueden costar de $5 en adelante.
Trabajo cuidadoso
Cada mueble en miniatura es elaborado como si se tratara de uno con dimensiones normales, el cual es clavado, pegado y barnizado. El trabajo es minucioso y cada detalle es cuidado al máximo.
“Cinco gaveteros, sin espejos, se pueden fabricar en dos días, es todo un proceso que inicia con la selección de los materiales”, detalla Francisco.
Cuenta que utiliza herramientas que han sido adecuadas para los espacios pequeños en los que trabaja; un pequeño serrucho y formones con puntas especiales son muestra de ello. “No…, si trato de cortar esta madera con la sierra grande fácil termino sin dedos”, dice.
Cerca del área de trabajo en esa carpintería se encuentran apilados muchos trozos de madera, la mayoría de diferentes tamaños. Francisco toma uno y dice: “veo cada pedazo y me imagino qué pieza se puede elaborar”.
En esa carpintería también son elaborados yoyos, capiruchos y floreros, entre muchas otras artesanías, también muebles de uso diario y hasta ataúdes.
El cantón San José Cortez alberga a decenas de carpinteros, pero curiosamente solo Francisco trabaja modelos pequeños.
“A veces los demás carpinteros de aquí cerca queman los pedazos de madera pequeños, hay algunos que me traen las costaladas y me dicen que yo si los voy a ocupar”, concluye Hernández.
Los muebles de Francisco son comercializados en el centro de Ciudad Delgado y también ya hay clientes que los buscan. El 7001-7397 es su número de contacto.