Fiscalía acusa a policías y otros imputados que integraban grupo de sicarios que cobraban $3,000 por homicidio

El Ministerio Público pidió al tribunal que los 22 acusados se mantengan en detención preventiva por considerar que existe la posibilidad de que puedan burlar a la justicia.

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Las 19 personas detenidas, entre éstas once policías, fueron presentadas en la Subdirección de Investigaciones. Fiscalía los acusará de 85 casos de delitos entre homicidios, agrupaciones ilícitas y fraude procesal. Foto: Twitter @FGR_SV

Por David Marroquín

2019-10-02 3:15:34

Los 11 policías y los once particulares acusados de integrar un grupo de exterminio, fueron presentados este miércoles por la tarde al Juzgado Antimafia de Instrucción de San Miguel para que sean procesados por 48 asesinatos de pandilleros y supuestos colaboradores de las pandillas.

La Fiscalía General de la República (FGR) pidió al referido tribunal que los 22 acusados se mantengan en detención preventiva por considerar que existe la posibilidad de que puedan burlar a la justicia, si les dan libertad condicional.

También solicitó que se giren las órdenes de captura para el exagente del extinto Grupo de Reacción Policíal (GRP), Juan Josué Castillo Arévalo, tres policías activos, cinco expolicías y dos particulares.

Castillo Arévalo, “Samurái”, es acusado de haber desaparecido y asesinado a la agente de la Policía Carla Ayala, la madrugada del 29 de diciembre de 2017. También por ese caso es prófugo de la justicia.

El padre y hermano de Castillo Arévalo son acusados de integrar este grupo de sicarios que según las investigaciones de la División Élite contra el Crimen Organizado (DECO), cobraba desde 800 hasta 3,000 dólares por atentado.

El día de su captura, el Ministro de Seguridad, Rogelio Rivas añadió que los familiares de “Samurái” no tenían nada que ver con caso de la agente Ayala.

Los hechos fueron cometidos por miembros de la corporación policial que simulaban operativos de capturas de las víctimas, dijo uno de los fiscales del caso.

Agregó que “llegaban en horas de la noche a sacarlos de sus casas, simulando de que tenían órdenes de detención emitidas contra ellos, y posteriormente eran trasladados a lugares desolados donde les quitaban la vida”.

Entre los casos se encuentra un múltiple homicidio de supuestos pandilleros registrado el 23 de noviembre de 2015 en el cantón Ojuste de Usulután.

Joel Isaac Castillo Arévalo, de camiseta negra, es uno de los detenidos ligados a un grupo de exterminio. Foto EDH/Menly Cortez