La Fiscalía General de la República ha solicitado ante el Juzgado Noveno de Instrucción un proceso abreviado con el que pretende que el expresidente Antonio Saca admita que sobornó a una empleada judicial a cambio de recibir una pena menor por ese delito.
Saca, quien cumple condena de 10 años de cárcel por haber aceptado el robo de 301 millones de dólares cuando fue presidente, es acusado de sobornar a una empleada de la Cámara Primera de lo Civil de San Salvador para que presuntamente filtrara información de un proceso en su contra por presunto enriquecimiento ilícito en el que está ligado a su exsecretario privado, Elmer Charlaix.
Charlaix ya está condenado a 10 años por haber aceptado -en proceso abreviado- haber cometido los delitos de lavado de dinero y peculado.
Fuentes fiscales aseguraron que se habría negociado dos años de prisión a cambio de la confesión de Saca. De concretarse la negociación le sumarían estos dos años a los diez que ya cumple en Mariona.
Según la Fiscalía General de la República (FGR), el expresidente Saca ofrecía sumas de dinero a funcionarios públicos para su beneficio. Son 14 imputados más, distribuidos en 30 casos distintos de soborno.
Según las autoridades, Saca contactó al abogado Víctor Manuel Melgar para que lo beneficiara en el caso por enriquecimiento ilícito que se ventilaba en dicha Cámara.