Entre los obstáculos que enfrentan las personas con diagnóstico de problemas mentales está el estigma, ya que hay población que utiliza palabras hirientes para referirse a ellos, comentó Lili Rodríguez de la Asociación Salvadoreña de Familiares y Amigos de Personas con Esquizofrenia y otras Discapacidades Mentales (Asfae).
Además hay casos donde a la familia le da pena reconocer que uno de sus miembros tiene algún problema mental; principalmente por el qué dirán las demás personas. Por ello, son consideradas enfermedades silenciosas.
“El hecho de que uno tenga una discapacidad mental no quiere decir que no podamos salir adelante. Yo soy chef pastelera, (fui concejal por cuatro años del CONAIPD), tengo a cargo a estos muchachos y tengo otros trabajos adicionales. El que sea bipolar no me quita a mí que pueda llevar un trabajo en sí. El estigma es lo peor que puede haber, con lo único que se le puede quitar a la sociedad ese estigma nada más es con darles charlas motivacionales”, dijo Rodríguez, quien también ha sido víctima de discriminación debido a su diagnóstico.
El doctor Rafael Gilberto Chávez Reyes, presidente de la Asociación de Médicos Psiquiatras Salvadoreños para la Salud Mental (APSAM), señaló que uno de los mitos más relacionados a los trastornos mentales es la violencia; sin embargo, está descrito que quienes están en dicha situación son grupos poblacionales que más sufren maltrato y acoso por su condición.
También son estigmatizados por tener problemas mentales, “ya no digamos esquizofrenia; si la esquizofrenia es el tildado de loco”.
“Difícilmente va a ser aceptado por la sociedad; por lo cual tienden a sufrir marginación y eso de por sí, ya es violencia. Realmente estas personas que adolecen de cualquier trastorno mental sufren bastante maltrato por parte de la población, de las instituciones y muchas veces, desgraciadamente, de la misma familia porque solo el hecho que diga ‘voy para donde el psiquiatra’ ¿qué es lo que le dicen?, acaso estás loco, vas donde el loquero. Entonces toda esa mofa definitivamente va en menoscabo de la autoestima de la persona. Por lo tanto es la persona que adolece de trastorno mental quien sufre realmente maltrato, violencia y no al revés”, dijo el médico.
Tanto APSAM y Asfae coincidieron en señalar que la educación en la población permitirá que tengan menos temores en las manifestaciones de un paciente con algún trastorno mental.
Asfae nació en el 2001 y antes de la pandemia se reunían en el Hospital Policlínico Arce donde proporcionaban charlas y realizaban actividades físicas.
Sin embargo, por el momento las reuniones se realizan de forma virtual y atienden a un grupo de 45 jóvenes.
Para las personas que deseen ayuda o información de la Asociación pueden comunicarse a los números telefónicos 7232-7999 y 7497-2590.