Clientes no pueden ingresar sin mascarilla, y otras medidas de seguridad implementadas en el mercado Central
En el mercado Central se han adoptado diversas medidas ante la emergencia por el COVID-19. Comerciantes aseguraron que este domingo la afluencia de clientes disminuyó, pero siguen vendiendo. Compradores dijeron que los precios y el abastecimiento de los productos no ha variado mucho.
Una de las medidas a las que la Policía Nacional Civil está vigilante con todo el que ingresa al mercado Central de San Salvador es que lleve puesta la mascarilla.
Durante un recorrido este domingo por la mañana, se constató que los elementos policiales no permitían el ingreso de personas a este centro de abastos si no llevaban una mascarilla. Esa es una de las principales medidas de seguridad adoptadas en este mercado ante la emergencia por COVID-19. Además, el acceso sólo se ha habilitado por algunos portones, esto para evitar aglomeraciones.
Entre otras medidas implementadas es el cierre de algunos puestos. Por ejemplo, los puestos de venta de florespermanecen cerrados por disposición de las autoridades, pues sólo se permite la venta de productos de primera necesidad en los centros de abastos.
Mientras que en el edificio de las cocinas no todos han abierto, pues la disposición de “sólo para llevar” les ha causado baja en las ventas, aseguran los comerciantes.
David Mendoza, residente en la Zacamil, llegó el domingo por la mañana a realizar sus compras. A su juicio, en ese centro de abastosse estaban respetando las medidas sanitarias como reducción aglomeraciones, evitar tocar superficies, barrotes, utilizar mascarillas y tener medidas preventivas ante personas que tosían o estornudaban.
En general, la actividad comercial en unos de los principales mercados del país se desarrolla casi con plena normalidad. Sin embargo, los comerciantes dicen que hay reducción en la afluencia de clientes desde que comenzó el plan de emergencia nacional.
“Las ventas han bajado, la gente no está viniendo a comprar, ya empezamos a tener pérdidas; nos estamos rebuscando, llegamos a las 6:00 de la mañana y a las 2:00 p.m. nos vamos porque a las 3:00 p.m. cierran”, afirmó Ronald Alonso Miranda, quien comercializa verduras.
Un elemento de seguridad del mercado afirmó que la afluencia al lugar había bajado un 60 %, lo que favorecía las medidas sanitarias para prevenir el COVID-19 y que el horario especial por la emergencia era de 4:00 de la mañana a 3:00 de la tarde.