“En general (hubo) gran normalidad, comportamiento cívico de todos los ciudadanos, buena participación”, sostuvo hoy el embajador de la Unión Europea, Andreu Bassols.
Bassols, durante una entrevista del programa Pencho y Aída, comentó que si bien hubo algunas situaciones que afectaron, como el retraso en la apertura de centros de votación, o las colas que se formaron, han sido hasta cierto punto normales e inevitables ante el hecho de que se tenían que seguir los controles del COVID-19.
El embajador, quien advirtió la dificultad que se dio al momento del conteo en las Juntas y cuadrar las actas, explicó que los observadores especializados en elecciones que vinieron de la Unión Europea todavía no darán su reporte final.
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“El informe va a llegar más tarde, porque hay que verlo todo; no solamente el día de las elecciones, la preparación, sino también los días posteriores, la comunicación de los resultados, todas estas cuestiones que solo se pueden evaluar al cabo de unas semanas de las elecciones”, aclaró.
Alejandro Gutman, el fundador de la Fundación Forever y quien estuvo como observador invitado por parte del Tribunal Supremo Electoral (TSE), en la misma entrevista destacó que la gente participó.
Coincidió también en que en algunos lugares hubo atrasos, algunos tuvieron que ver por la lentitud en el acceso por las medidas de seguridad, en menor casos se dieron por falta de personal en las mesas.
“La regla fue que se comenzó en líneas generales a horario, que se terminó a horario, que la gente estaba muy satisfecha. Por lo menos en los 8 o 9 lugares (en donde estuve) yo pregunté a muchísima gente cuánto había sido el promedio de espera y había sido de 20, a 30 minutos, 34 minutos: en algunos casos sí, sobre todo en dos lugares comenzaron una hora y media tarde, en otro en una hora tarde, pero en los otros seis o siete habían comenzado puntualmente”, citó.
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Alfredo Atanacio Cader, empresario que fue parte del equipo de observadores destacado por la Fusades, de igual forma celebró la participación y normalidad que hubo en el desarrollo del proceso.
“Yo vi un proceso bastante normal, de hecho me llamó la atención eso sí que hubo menos presencia de los partidos políticos tradicionales, para ponerte un ejemplo en la Junta Receptora en la que yo estaba no había vigilante de ARENA, del FMLN tampoco; de hecho había un vigilante que se compartía digamos entre varias juntas receptoras”, señaló Atanacio Cader.
Más allá de coincidir en el buen desarrollo de las elecciones, tanto el embajador Bassols y Atanacio Cader, al ser consultados sobre los señalamientos de fraude que surgieron nuevamente, hicieron notar la necesidad de que se debe valorar más el trabajo del Tribunal Supremo Electoral.
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“Yo creo que sería muy importante para El Salvador que las instituciones electorales primero tuvieran más prestigio para la población, tuvieran más confianza; y segundo que todos los partidos políticos, instituciones, gobiernos ayudaran para elevar la confianza de las autoridades electorales”, insistió.
Subrayó el embajador Bassols que sería excelente que se luchara por el prestigio del TSE porque eso daría más tranquilidad a las autoridades electorales: “Yo creo que si lo consiguiéramos se habría dado un gran paso en adelante en la consolidación de la democracia en El Salvador y en otros países que tienen ese problema”.
Alfredo Atanacio Cader, quién también brindó opiniones como ciudadano, lamentó que todos los partidos políticos hablen de fraude siempre en algún momento pues es una práctica lamentable que no debería ocurrir, y a su criterio las elecciones de ayer fuera de algunas imperfecciones fueron libres, transparentes y democráticas.
“Nosotros como ciudadanos y los que son políticos y funcionarios deberían ayudar a consolidar las instituciones en El Salvador y no minar la confianza sobre las instituciones que tenemos, porque al final de cuentas el hecho de tener instituciones e institucionalidad en El Salvador fue un proceso largo que costó muchísimo al país, costó vidas”, afirmó.