El reto de dar salud bucal a las personas con discapacidad

Los odontólogos deben capacitarse para atender a las personas especiales, tradicionalmente sin acceso a estos servicios

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Entre los discapacitados hay incidencia de males periodontales y caries avanzadas.

Por Susana Joma nacional@eldiariodehoy.com

2014-05-23 8:00:00

La falta de acceso a la educación bucal y a los servicios de atención odontológica, es otra de las limitantes que enfrenta la mayoría de personas con discapacidad. Eso plantea un gran reto a las nuevas generaciones de profesionales de este campo.

La doctora Nadia Menjívar, vicedecana de la Universidad Evangélica de El Salvador (UEES) explicó que, en un foro llevado a cabo el pasado 15 de mayo para sensibilizar sobre esta problemática, se planteó que entre los discapacitados hay incidencia de males periodontales y caries avanzadas.

Menjívar detalla que esto tiene mucho que ver con la ingesta de algunos medicamentos que les aplican como parte de sus tratamientos, entre ellos, algunos anticonvulsivos y para el sistema nervioso. De igual forma, incide el hecho de que dependen de otras personas para su cuido personal constante, como el caso de quienes tienen síndrome de Down o parálisis cerebral, entre otros.

La odontóloga expresó que los resultados preliminares de encuestas que hicieron durante el evento, revelan que entre los más de 200 asistentes (docentes, estudiantes, personas con discapacidad, personal administrativo, miembros de organizaciones), hay confusión sobre el término correcto con el que se nombra a estas personas.

“Allí vimos un reto no solo de capacitar al personal de salud, sino también, a la comunidad universitaria en cómo debemos dirigirnos a esta población”, sostuvo la vicedecana que está encargada de los programas de proyección social de la carrera.

Una de las observaciones que los familiares discapacitados plantearon en el foro, es la necesidad de que los consultorios estén adecuados para que los pacientes que usan silla de ruedas se movilicen.

A esto se suma la necesidad de que los odontólogos tengan dominio del lenguaje de señas y tomen en consideración otras medidas para lograr comunicarse con estos pacientes.

La UEES es uno de los centros de educación superior que tiene la carrera de odontología y cuyos estudiantes atienden, en centros de atención, a personas con discapacidad. En este caso, en el Hogar de Parálisis Cerebral de esta capital, a través del área de salud comunitaria.

Menjívar dijo que el servicio que brindan en el Hogar de Parálisis, con apoyo de los estudiantes de séptimo año de la carrera y que cursan la materia de Salud Pública, va más allá de realizar limpiezas dentales. Bajo la guía de otra docente, hacen evaluaciones diagnósticas y procedimientos como obturaciones y exodoncias.

La vicedecana señaló que esa iniciativa se lleva adelante, tras identificar que en el Hogar hay una gran necesidad de atender la salud bucal de los niños y adultos que llegan, y la falta de profesionales que les brinden tratamiento.

Es así como 17 estudiantes llegan, en forma rotatoria, tres veces a la semana a atender a sus pacientes.

Sin embargo, la doctora Ruth Fuentes de Sermeño, decana de esa facultad, subrayó que ahora han dado un paso más, orientado a la educación y promoción de la salud bucal enfocado en los pacientes con necesidades especiales, en las personas que los cuidan y en otros profesionales de este campo de la salud.

“Queremos iniciar con la promoción de la salud porque es la raíz del problema. Cuando el paciente ya tiene lo que la doctora mencionaba, enfermedades periodontales, ya llegamos tarde al problema. Queremos prevenir”, subrayó Fuentes de Sermeño.

Esto implica, según detalló, que desde que el niño nace y se detecta que tiene alguna deficiencia, los cuidadores y padres de familia deben estarpendientes para que no lleguen a problemas tan severos como los que ahora encuentran entre esta población.

Menjívar y De Sermeño precisaron que estas intervenciones se dan en el marco de un convenio entre el Hogar y esa universidad.

“No queremos solo llegar a curar enfermedades, porque es un círculo vicioso que no terminamos (…) Y una persona que es dependiente, necesita un apoyo especializado y el gremio odontológico muchas veces ha descuidado esta situación”, citó la decana.

Así enfatiza la importancia de formar nuevas generaciones de odontólogos conscientes de los derechos que tiene este sector de la población, sensibles y dispuestos a proveerles la atención necesaria. A su criterio, lo mismo aplica para los profesionales de otras áreas de la salud, médicos, especialistas y sicólogos.

Carlos Palma, estudiante de séptimo año de la carrera de Odontología, expresó que él y otros dos estudiantes, José Carlos Rodas y Marcela Hasbún, desarrollan un estudio que implica capacitar a los auxiliares del Hogar, pues son los responsables de la higiene bucal de los niños.

“El hogar tiene trece auxiliares fijos, que son nuestro campo de estudio. Si logramos motivarlos, los beneficiados van a ser los niños”, detalló el joven.

José Carlos Rodas, compañero de Palma, explica que estos pacientes, tanto niños como adultos, tienden a tener desconfianza a la hora de ser atendidos y es necesario ganárselos.

“El trato es complicado y hay que hacerlo con mucho cuidado”, afirma Rodas, en alusión a que los pacientes, al igual que el resto de la población, suelen tener miedo, por lo que se deben evitar los movimientos bruscos al atenderlos. No obstante, aclara que con mucha paciencia y voluntad es posible atenderlos. “Hay que ponerles música. A algunos les gusta andar con lentes de sol, juguetes, cobijas”, agrega el estudiante.

La estudiante, Marcela Hasbún, señaló que es importante que los odontólogos estén sensibilizados y preparados para trabajar con personas discapacitadas para contribuir a que tengan acceso a los servicios de salud que tanto señala la Organización Panamericana de la Salud.

Hasbún destaca, también, que un profesional que tenga estas características, tendrá un valor agregado.