Dos supuestos pandilleros murieron anoche tras enfrentarse a policías de la Sección Táctica Operativa (STO) en el cantón El Nisperal de Santa Elena, Usulután. Otros tres fueron capturados, según fuentes policiales.
Las autoridades policiales aseguraron que dos pistolas fueron decomisadas, con las cuales atacaron a los policías, mientras estos realizaban un patrullaje de rutina.
Uno de los pandilleros muertos fue identificado por las autoridades policiales como Wilfreo Granado Romero, apodado El Guasón y supuesto segundo cabecilla de pandilla; mientras que el segundo solo fue identificado por su apodo El Chucho.
Los otros tres supuestos mareros detenidos son: Carlos Antonio Romero Hernández, Yelsín Josué Cruz Arriola, y Robin de Jesús Amaya López, según el informe policial.
Granado Romero era reclamado por las autoridades judiciales para que sea procesado por homicidio agravado e intento de homicidio. Además tenía antecedentes delictivos por agresión sexual, tenencia ilegal de arma de fuego y resistencia.
Los dos están vinculados al asesinato del policía del STO, Héctor Ulises Flores, ocurrido en el 30 de noviembre de 2017 en Santa Elena.
Por ese crimen, Juan Antonio Ramírez, otro supuesto pandillero, cumple una condena de 50 años de prisión, según la Fiscalía General.
El miércoles pasado, un agente de la Policía se defendió de un ataque que le hicieron dos pandilleros y logró matarlos. El hecho se produjo en el cantón El Junquillo de Ahuachapán.
El 25 de junio pasado, tres pandilleros murieron al enfrentarse a policías que patrullaban el sector de la comunidad Anémona en San Martín. Un fusil M-16 quedó cerca del cadáver de uno de los tres pandilleros muertos, según la Policía.
La violencia criminal de las pandillas ha acabado con la vida de 24 policías, 12 militares y dos custodios penitenciarios.