Asamblea declara de interés público el proyecto de construcción de la Biblioteca Nacional

Con esa declaratoria cualquier área de terreno público que el gobierno considere necesario para la ejecución de las obras podrá ser intervenida o expropiada en caso de que el dueño sea privado.

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La Biblioteca Nacional de El Salvador poseía el título de Patrimonio Cultural desde 2008. FOTO EDH Archivo

Por Eugenia Velásquez

2021-12-21 8:50:46

El convenio que el gobierno de El Salvador firmó con la República Popular de China para desarrollar la construcción de la nueva Biblioteca Nacional contempla la declaratoria de interés público y social las obras a ejecutarse en el edificio ubicado en el Centro Histórico de San Salvador.

Así lo reza el artículo 2 de las disposiciones especiales para la aprobación y ejecución del proyecto de asistencia de la construcción de la Biblioteca Nacional.

#EnVivo | Sesión Plenaria N° 35

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Posted by Asamblea Legislativa de El Salvador on Tuesday, December 21, 2021

“Declárase de interés público y social el proyecto de que tratan las presentes disposiciones; en consecuencia, las diferentes instituciones de gobierno, instituciones oficiales autónomas y la municipalidad vinculadas a su procedimiento de revisión y aprobación y autorización, deberán ejercer de manera ágil y eficiente las atribuciones que por se les han conferido”, manifiesta el artículo en mención.

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Señala que el Ministerio de Vivienda será la institución competente para conocer, otorgar y autorizar los trámites de calificación del lugar, línea de construcción y factibilidad de aguas lluvias, permiso de construcción, recepción de obras y permiso de habitar el proyecto, para lo cual deberá hacerse conforme a los requisitos y normativa establecidos en la Ley de Urbanismo y Construcción y su Reglamento; debiendo contar con las aprobaciones culturales y ambientales que correspondan.

El pacto con los chinos tal como quedó establecido en el convenio aprobado en mayo pasado por los diputados del presidente Nayib Bukele les otorga amplias facultades al gobierno de China, por tal razón en el dictamen que se prevé sea aprobado hoy en la plenaria, explica que los “profesionales de la República Popular China que tengan a su cargo la investigación, estudio, diseño, construcción y entrega del proyecto, estarán exentos del pago del precio por la emisión, refrenda y/o reposición de carné de inscripción en el Registro Nacional de Arquitectos, Ingenieros, Proyectistas y Constructores que lleva el Ministerio de Vivienda”.

Así como también todas las diligencias y trámites que fueren necesarios para el proyecto, relativos a la aprobación de planos por la Oficina de Mantenimiento Catastral del Instituto Geográfico y del Catastro Nacional y cualquier otro acto inscribible en el Registro de la Propiedad Raíz e Hipotecas, ambas entidades del Centro Nacional de Registros, estarán exentos del pago de los derechos catastrales y registrales correspondientes.

La construcción de la Biblioteca Nacional es parte del conglomerado de obras que el gobierno salvadoreño planea hacer con la cooperación del gobierno de China; sin embargo, en otros países en donde el gigante asiático ha intervenido con proyectos no siempre involucra un beneficio para los habitantes de esos países, ya que la mano de obra es traída de China, es decir, no se generan empleos locales.

Esto ha pasado en Costa Rica, Panamá y República Dominicana, en donde el gobierno chino ha hecho mega proyectos.

En el convenio autorizado por la Asamblea oficialista en mayo de este año, se plasma que será la potencia China quien decida qué proyectos se ejecutan. Ese instrumento de cooperación fue aprobado por los diputados de Bukele el mismo día que la Cancillería lo ingresó al pleno sin mayor discusión.

Según el jefe de fracción de Nuevas Ideas, Christian Guevara, se trata de un pacto de cooperación que Bukele firmó con la República Popular de China en diciembre de 2019 por $500 millones.

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En esa ocasión la ex subsecretaria interina para Asuntos del Hemisferio Occidental de Estados Unidos, Julie Chung, advirtió a Bukele que “nada de China viene sin condiciones”.

“Los chinos enviarán a sus propios expertos, además, elegirán la entidad ejecutora, las personas que ejecutarán la obra será personal chino y se les deberá dar visas, incluso, su salario estará exento de impuestos”, se quejó la diputada de ARENA, Marcela Villatoro.

Además, el tratado con China no dejará ningún capital de inversión propio ni personal salvadoreño especializado en tecnologías nuevas; y lo que más preocupa dijo Villatoro en esa ocasión, es que hay una adenda dentro del convenio en donde dice que el gobierno excluirá dentro del ámbito de aplicación de la Ley Lacap, las adquisiciones y contrataciones que se efectúen.