La diputada Anabel Belloso, del FMLN, lamentó este jueves la postura que ha tomado el gobierno de Nayib Bukele ante el tratado firmado el miércoles por los mandatarios de Honduras y Nicaragua, Juan Orlando Hernández y Daniel Ortega, para definir sus fronteras en el Mar Caribe y en el Océano Pacífico, incluyendo el Golfo de Fonseca que comparten con El Salvador.
Para la legisladora, el Ejecutivo debería tomar un rol "más protagónico" en la situación.
"Es preocupante, porque ante un discurso aparentemente de defensa de la soberanía que mantiene el mismo presidente Bukele cuando hay que tomar acción específicamente en casos concretos como este que no es un tema nuevo, sino que siempre ha habido temas de definición sobre la delimitación de los territorios, creo que lo menos que debe hacer el país a través de su gobierno y de las instancias que le corresponde es participar de manera activa en defensa justamente del territorio nacional y no lo estamos viendo así", señaló Belloso a periodistas.
Al respecto, el diputado Romeo Auerbach, de GANA, dijo que no hay de qué preocuparse, porque manifestó que no es potestad de los presidentes el delimitar territorios entre países y consideró que el tema "es más político" por el contexto electoral en el que se encuentran ambas naciones.
"De hecho ya hay una delimitación con todo y un fallo de La Haya que ha delimitado cómo queda el Golfo de Fonseca y nosotros tenemos nuestro espacio en el Golfo de Fonseca, estemos o no estemos en una reunión convocada por ellos dos. No es una competencia de los presidentes delimitar territorio de un país con otro. Si El Salvador no estuvo (en la firma del tratado) sus razones de peso tendrá", afirmó.
Belloso fue más allá y, aunque indicó que la problemática del Golfo de Fonseca no es nueva, advirtió que "ya hemos visto que en otros momentos, incluso, hemos ido perdiendo territorio en otras zonas", por lo que "la exigencia debe ser en que el gobierno se pronuncie, pero que, además, tome acción (de) que no quedemos fuera".
El secretario de Comercio, Miguel Kattán confirmó este jueves que ambos gobiernos no invitaron a El Salvador a la firma de ese acuerdo que para él no tiene validez y solo busca rédito político de cara a las elecciones presidenciales de esos países.
Una de las razones que argumentó el funcionario fue la sentencia de 1992 de La Haya que establecía que el acuerdo sobre los límites marítimos debía hacerse entre los tres países centroamericanos.