El 19 de septiembre de 2019, Tomás Ezequiel González Galván, de 26 años, fue diagnosticado con insuficiencia renal crónica. Este diagnóstico le ha obligado a dializarse (limpieza de sangre con químicos) para poder sobrevivir, sin embargo cada día la lucha es mayor ya que no cuenta con los recursos necesarios para poder realizarse las tres sesiones de hemodiálisis que necesita cada semana, en promedio.
“Necesito ayuda económica para hacerme las hemodiálisis porque cada una viene costando más de $120 y me hago hasta tres hemodiálisis y a veces cuatro, y no cuento con los recursos necesarios para tener ese tratamiento que sí necesito porque el funcionamiento de mis riñones es mínimo, mi cuerpo se llena de tóxico y líquido”, cuenta Tomas.
Este joven inició su tratamiento en el Hospital Nacional de San Miguel, y realizaba las diálisis peritoneales en casa de Ana Díaz, ubicada en la comunidad Nuevo Amanecer, del cantón San Felipe de Concepción Batres, Usulután. Díaz decidió extender su mano amiga a Tomás y apoyarle como a un hijo, ya que la madre de Tomás reside fuera del país y también tiene un diagnóstico de insuficiencia renal.
“Busqué un hospital privado por muchas razones, el catéter se me dobló y tuve una infección peritoneal; en el hospital me dijeron que no me podían operar, también cuando estuve ingresado en el hospital vi personas que no resisten el tratamiento o en ocasiones no cuentan con espacio para realizar una hemodiálisis de emergencia”, narró Tomas.
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Las personas que hasta este momento ayudan a Tomas se vieron en la necesidad de solicitar un documento al Dr. Juan Francisco Villatoro Velázquez, nefrólogo internista, para constatar el estado médico de su paciente y así poder demostrar que requieren de la ayuda de personas altruistas.
“El paciente depende económicamente de ayuda humanitaria sólo para el tratamiento que tiene un promedio mensual de $2,000 para cubrir las hemodiálisis, medicamentos, transporte y alimentación Lamentablemente la ayuda que se le brinda es insuficiente y en ocasiones no cuenta para cubrir dichos tratamientos”, se lee en el documento.
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Además de la insuficiencia renal, también debe de lidiar con hipertensión arterial. A pesar de ello su médico le da esperanzas de vida, “teniendo la dieta adecuada y la hemodiálisis puede sobrevivir algunos años, hay personas que viven hasta 20 años con el tratamiento, pero como esto afecta también otras partes del organismo, no sé cuánto pueda vivir”, explicó Tomás, que a pesar de todo espera poder retomar sus estudios, ya que solo cursó hasta octavo grado.
Las personas que deseen colaborar con Tomás González pueden hacerlo mediante la cuenta bancaria de la Caja de Crédito de Santiago de María, numero 09-01-0007387-2 a nombre de Ana Delmy Díaz de Soriano, o comunicarse al 75630159.