Para Paz Zetino Gutiérrez, secretario general de bases magisteriales, el mayor desafío para los docentes es encontrar empleo y esa puede ser una razón por lo que aceptan a exponerse a estas condiciones. También para iniciar su carrera e ingresar al magisterio.
“En este país la carrera docente no es bien vista por los gobiernos, nosotros a la derecha le recriminábamos que no nos dignificaban, que no valoraban la profesión; y la izquierda nos dijeron que al estar en el poder iban hacer todo eso, pero pasaron sin pena y gloria. Hoy tenemos otro gobierno, uno tiene que estar observando que realmente va a hacer los cambios y transformaciones”, recalcó Zetino.
Explicó que cuando las autoridades van hacer una presentación de un plan muy poco se habla de la condición laboral y social de los profesores. Instó al Ministerio de Educación que tiene que focalizar todas las escuelas que están en condiciones paupérrimas, donde se pone en riesgo la seguridad y salud de los maestros.
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Zetino comentó que otra de las razones puede ser el bono de ruralidad que reciben al trabajar en estas escuelas de difícil acceso. “Según la ley ese incentivo es $40 mensuales. Hay profesores que por eso no se mueven”, comentó. También mencionó los lazos que hacen y terminan comprometidos con la comunidad.
En este caso, la ley establece que para efecto de determinar sobresueldos, se entenderá por área rural distante y de difícil acceso, toda aquella donde exista una institución educativa que reúna las características geográficas donde el lugar no permita que haya servicio de transporte de vehículo automotor. Que por razones de distancia, características geográficas y situación de peligrosidad, el educador tenga que permanecer en el lugar durante la semana de labores.
El educador que residiere en un área rural calificada por el Ministerio como distante y de difícil acceso, tendrá derecho el sobresueldo a que se refiere este artículo.
“Muchos maestros resentimos la falta de atención que el Estado nos da pero uno al final llega a concluir que la gracia por pasar por este mundo es hacer un sacrificio para ayudar a los demás. Uno espera que el Estado como tal en algún momento le reconozca, esa es la deuda que tiene el Ministerio de Educación. Tenemos años pero muchos años de no tener un ministro o una ministra de Educación que en realidad se preocupe por la situación de los maestros”, concluyó.
El impacto en la Educación
El doctor Óscar Picardo Joao, director del ICTI (Instituto de Ciencia, Tecnología e Innovación) y especialista en educación, explica que “ya cuando tu espacio de esparcimiento termina siendo tu propio trabajo creo que se empieza a reducir también la visión de la vida misma, emocionalmente afecta porque uno necesita tiempo de ocio”.
Para el especialista adaptarse a esta rutina disminuye las aspiraciones laborales e incluso afecta la calidad de vida de los hijos de los profesores, quienes crecen con madres o padres ausentes. Añade que una consecuencia de las aulas integradas son los bajos resultados en las pruebas como la PAES.
“En el sector público ha habido un resultado generalizado de no más del 50% de logros de aprendizaje, es decir los niños aprendían la mitad de lo que tenían que aprender y en el área rural era aún menor, disminuye al 30%”, afirma.
Muchos docentes de zonas rurales viven 130 horas en sus trabajos y solo 38 en sus casas, aproximadamente. Están dispuestos a hacer estos sacrificios con la esperanza de obtener una plaza fija o si ya la consiguieron, esperan un traslado a una zona que les convenga más, conscientes de que la ley dice que son tres años para solicitar el traslado.