Familia busca en hospitales y morgues con la esperanza que hombre desaparecido no esté herido o muerto

Juan Carlos Serrano desapareció el pasado 31 de agosto, instantes después de salir de su trabajo en el municipio de Soyapango. Desde entonces, su familia no para de buscarlo. Ambos son padres de un bebé de ocho meses.

descripción de la imagen

Por Jonathan Tobías

2020-09-08 11:28:00

Juan Carlos Serrano, de 26 años, fue visto por última vez el pasado 31 de agosto, cuando salía de trabajar en una empresa del municipio de Soyapango. El joven es repartidor en una compañía embotelladora. Reside en el municipio de Cuscatancingo, en San Salvador. Familia y amigos solicitan ayuda para localizarlo. “Nadie nos dice nada. Ya no sé en dónde buscar”, dicen.

Compañeros de trabajo recuerdan que Juan Carlos salió a las seis de la tarde de la empresa y se dirigió a un pequeño negocio de comida en la zona. “Guárdeme la mochila, que ya voy a regresar”, dijo a una de las empleadas de ese lugar. Así lo relataron a la familia.

El día en que desapareció, Juan Carlos vestía su uniforme de trabajo, se retiró del lugar sin informar a nadie hacia dónde y con quien se dirigía. “Lo único que dejó fue su mochila”, dice su familia. Algunas de las personas que estuvieron en el lugar, relatan que el joven recibió una llamada telefónica antes de marcharse.

Para su familia era “normal” que su pareja llegara a casa ya entrada la noche. Él acostumbraba a departir con amigos después de trabajar. Pero jamás esperaba hasta el amanecer para regresar, fue entonces cuando la familia comenzó a sospechar. Llamó por teléfono para localizarlo, pero el celular ya se encontraba apagado.

Sus familiares relatan que ha visitado hospitales y hasta morgues con la esperanza de descartar que se encuentre herido o haya muerto. “Espero lo peor. Ya son varios días”, dice angustiada.

Familiares recuerdan que Juan Carlos visitaba lugares remotos por su trabajo, incluyendo zonas consideradas violentas o conflictivas. Temen que la desaparición se encuentre vinculada con algún problema que haya sucedido en esos sitios. Sin embargo, enfatizan que su pareja no tenía problemas con nadie. “El podía tomar, pero no tenía enemigos”, declaran.

Juan Carlos pasa su tiempo libre con su bebé de ocho meses de edad. Foto EDH / Cortesía

Un hombre amoroso con su hijo

El tiempo parece que se detuvo para sus familiares, cuando Juan Carlos no regresó a casa. Ellos lo describen como un padre amoroso. Él es padre de un bebé de ocho meses: “un tesoro”, describen. “Él estaba loco por su niño. Anhelaba estar siempre con él”, recuerda y relata que era un hombre responsable.

Antes de la emergencia a causa del COVID-19, Juan Carlos trabajaba como motorista de transporte privado para estudiantes. Luego del cierre de escuelas y colegios, tuvo que buscar un nuevo empleo para solventar los gastos en casa y que nada le faltara a su hijo.

Familiares del hombre aseguran que ya interpusieron una denuncia por la desaparición de Juan Carlos. “Hasta el día de ahora no se han movido. Dijeron que iban a rastrear el celular pero no lo han hecho”, expresa, con cierta indignación, y considera que el proceso de investigación y búsqueda ha sido deficiente.

“Les dijimos que si no nos iban a ayudar, lo haríamos por nuestra propia cuenta”, comentan. El poco interés por parte de las autoridades llevó a la familia a denunciar la desaparición a través de diferentes plataformas en redes sociales. Además, habilitaron dos números telefónicos para que quien tenga información relevante pueda comunicarse con ellos: 7683-0894 / 7087-9697.

Luego de la denuncia de su desaparición en diferentes plataformas, la Fiscalía General de la República hizo eco del caso. Foto EDH / @desaparecidoFGR