Luego de más de dos semanas de paralizados los trabajos de excavación en la casa del exagente de la Policía Nacional Civil, implicado en una serie de asesinatos en Chalchuapa, las autoridades retomaron los trabajos desde el lunes,
“Desde lunes están trabajando, pero por el momento no se ha encontrado nada”, señaló la fuente.
El criminólogo forense de la Fiscalía, Israel Ticas, se encuentra con un grupo de forenses y otros técnicos desarrollando trabajos en la casa.
Las autoridades tratan de confirmar o descartar si el exagente de la PNC enterró a más víctimas en esa vivienda.
En el tiempo que el expolicía vivió en Cojutepeque, desaparecieron tres jóvenes: dos mujeres y un hombre: Daniela, de 14 años, Karla, de 26, y Eduardo de 28.
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El exagente estuvo destacado en Cojutepeque en sus tiempos de policía, fue entonces cuando decidió radicarse también en ese municipio aunque mantenía siempre su casa en el barrio Apaneca, callejón Estévez, en Chalchuapa, donde hallaron un cementerio clandestino.
El exagente es procesado por los asesinatos de madre e hija. Pero además es testigo de la Fiscalía contra otras diez personas por no menos de 12 homicidios, cuyas víctimas estaban enterradas en la casa de Chalchuapa.