Eran aproximadamente las 4:20 de la tarde del miércoles 2 de junio cuando el teléfono de Daniel Ernesto Castillo dejó de recibir llamadas. Al otro lado, era su madre Cristina Castillo quien intentaba comunicarse de forma constante, sin recibir respuesta alguna.
Según doña Cristina, Daniel es un joven bueno, trabajador, honesto; y el día en que dejaron de saber de él se encontraba cerca del estadio Cuscatlán, en la colonia Monserrat de San Salvador, debido que recién se había bajado de un microbús de la ruta 44 y se dirigía a abordar la ruta 10 con destino a su casa.
La última vez que el joven se comunicó con su madre fue ese mismo día, a eso de la 1:15 de la tarde, cuando ella le llamó para cuestionarle por qué no le había avisado si estaba ya en su lugar de trabajo, pues es costumbre del joven avisarle cuando llegaba.
"Perdón, mamá, se me olvidó avisarte", fue lo que Daniel le dijo a su madre ante la pregunta. "Lo último que me dijo fue que me amaba y me envió tres besitos antes de colgar", dice Cristina.
El joven, quien tiene 21 años y, además, una hermana mayor, está siendo buscado por toda la familia, quienes ya dieron aviso a la Fiscalía General de la República (FGR) y a la Policía Nacional Civil (PNC) para que puedan ubicarlo.
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No obstante, Cristina se muestra optimista y afirma: "tengo fe en Dios en que mi hijo está vivo y volverá a su casa", a la vez que considera la situación como un "rompecabezas que no pueden armar", debido a que no saben qué pudo haberle pasado a Daniel para que ya no supieran más de él.
Ante ello, la familia ha habilitado el número de teléfono 7762-7407 para que las personas que puedan saber sobre el paradero de Daniel puedan comunicarse con su familia de inmediato.