Numerosas alcaldías a nivel nacional han tomado la iniciativa de desinfectar a sus habitantes, superficies de espacios públicos y mercados para evitar la propagación del COVID-19, el cual ya se encuentra circulando en las comunidades.
Para ello han recurrido a rociar con lejía ((hipoclorito de sodio disuelto en agua) y amonio cuaternario a las personas, obligándolas a pasar por un túnel o cabina de desinfección; y se han dado a la tarea de desinfectar las llantas de los vehículos.
El amonio cuaternario es un desinfectante que tiene efecto sobre virus, esporas, bacterias y hongos.
Un ingeniero químico y un experto en virus evaluaron el trabajo que están realizando las comunas para tratar de contener la propagación del virus y, a su juicio, las medidas implementadas son efectivas.
El ingeniero químico, Juan Manuel Pérez, expresó que el trabajo de desinfección que se hace con amonio cuaternario y lejía “tienen efecto porque estamos hablando de un microorganismo. El virus es más pequeño que la bacteria por lo que se necesita poco (de químico) para alcanzar la desinfección”.
Pérez pidió que las concentraciones que están utilizando las alcaldías para la desinfección deben de ser las exactas, con las cuales no se vaya a dañar a las personas sino que sirva para matar el virus.
El especialista recordó que la lejía con la luz del sol se va degradando y pierde la fuerza, por lo que si las familias lo están utilizando en el agua de sus pilas y barriles la deben de aplicar diariamente.
“El hipoclorito de sodio (lejía) por su acción, destruye la pared celular de todo lo que tiene enfrente (en este caso del virus)”, dijo el ingeniero químico.
Pérez explicó que, dado que el virus está en superficies, las personas tienen que asumir que desde el primer momento que salen de sus casas hacer diligencias, se van a contaminar, por lo que pasar por el arco o túnel de desinfección les bajará la carga del virus o los va a descontaminar.
El académico experto en virus de la Universidad de El Salvador (UES), Carlos Ortega, aplaudió las medidas que han adoptado las alcaldías para reducir el riesgo de infección del COVID-19.
Indicó que el amonio cuaternario y la lejía contribuyen y disminuyen la posibilidad de infección cuando una persona tuvo contacto y llevaba una secreción en su cuerpo.
Ortega fue claro al decir que todas esas medidas seguirán siendo efectivas si la población sigue manteniendo el distanciamiento físico, use mascarilla y sigue todas las medidas higiénicas en sus hogares.
“En el caso hipotético de una persona asintomática, puede pasar por el túnel de desinfección pero si anda expeliendo el virus al hablar o toser frente a otras personas, de nada va a servir que haya pasado el túnel si no utiliza la mascarilla”, aclaró el experto en virus.
Otra de las recomendaciones que hizo Ortega es que todas las personas que se higienizan en los arcos o túneles deben de entrar a los lugares cuando también estén desinfectados, de lo contrario no servirá de nada la medida del túnel.
El trabajo de las alcaldías
La alcaldía de Sonsonate incrementó las medidas higiénicas, luego que en San Antonio del Monte reportó el primer caso de coronavirus del departamento. Para ello, la alcaldía instaló controles sanitarios en todas las salidas del municipio y está aplicando alcohol gel al 100 % a los usuarios de los mercados.
En el municipio de Sonsonate, el alcalde pretenden realizar jornadas de higiene rociando amonio cuaternario o hipoclorito de sodio (lejía) para ampliar la desinfección del municipio. El edil solo espera el visto bueno del Ministerio de Salud.
Sobre el mecanismo que pretende implementar en Sonsonate, el ingeniero químico opinó que no le ve mayor ventaja porque los químicos están hechos para usarse en superficies y no en las personas, lo que les puede ocasionar algún problema en la piel.
Otra de las medidas que no le ve ninguna eficacia es la desinfección de las llantas de los vehículos. La medida se ha adoptado cuando los autos entran a los municipios; sin embargo, una vez comience a circular, el vehículo ya se volvió a contaminar, aseguró.
En el municipio de San Francisco Gotera, Morazán, varias comunidades han puesto cercos sanitarios como medida para prevenir el contagio del virus.
Los cercos sanitarios están desde el departamento de Ahuachapán hasta La Unión, la mayoría como decisiones de alcaldías, pero también hay por iniciativa de ciudadanos.
