La crisis causada por el COVID-19 incrementará migración y el desplazamiento forzado

Tutele legal advierte que la crisis económica, el desempleo y falta de políticas podrían influir en movimiento migratorios como las caravanas. También, la falta de posibilidad para pagar la renta a las pandillas podría incrementar el desplazamiento forzado de las familias.

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Este grupo de jóvenes forma parte de la nueva caravana de salvadoreños que partirá este 20 de enero desde la plaza Salvador del Mundo hacia Estados Unidos. Foto EDH/ Jorge Reyes

Por Nancy Hernández

2020-10-01 3:53:41

Este miércoles por la noche salió la primera caravana de migrantes de Honduras hacia Estados Unidos, durante meses las fronteras estuvieron cerradas por la emergencia sanitaria provocada por el COVID-19, esto llevó a disminuir la migración irregular hacia Estados Unidos, pero ahora que las restricciones en las fronteras son mínimas, es probable que migrar se convierta en la única salida de centroamericanos, incluyendo salvadoreños.

Para Ovidio Mauricio González, director de Tutela Legal “María Julia Hernández”, la crisis sanitaria agudizó aún más el deterioro de la economía de miles de familias salvadoreñas puesto que el desempleo y la pobreza han incrementado, por tanto es probable que en los próximos meses haya más compatriotas migrando y buscando mejores oportunidades.

“La pandemia ha afectado, generado crisis económica y social esto hace que más salvadoreños quieran irse del país, la migración va aumentar, ya hay caravanas en otros países y eso va a impulsar la migración de salvadoreños”, dijo.

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La pérdida de personas que sostenían los grupos familiares, de micronegocios o medios de subsistencia también podrían agudizan la falta de recursos en las familias.

“Según expertos en migración, este aumento migratorio puede irse incrementando debido a la crisis económica derivada en Honduras, El Salvador y Guatemala, resultando que miles de personas están cayendo en la pobreza extrema. Datos del Instituto Salvadoreño del Seguro Social (ISSS) y del Sistema de Administración de Pensiones (SAP) registran más de 80 mil empleos perdidos en el primer semestre de 2020 y las ayudas a micros, pequeños y medianos empresarios nunca se hicieron realidad”, dice el comunicado de prensa emitido por la institución.

La Fundación Salvadoreña para el Desarrollo Económico y Social (Fusades) hasta junio de este año se han perdido 72,000 empleos, pero también habría que sumar cerca de 55, 360 jóvenes que entran en etapa de laboral y buscan un trabajo, en total se necesitaría cubrir 127,360 plazas.

La situación se vuelve aún más complicada porque El Salvador es el país más afectado económicamente por la pandemia, pues según el Índice Mensual de Actividad Económica (IMAE) que elabora la Secretaría del Consejo Monetario Centroamericano, el país cayó 14.3 % mientras que la actividad económica de Honduras y Guatemala cayeron 12.4 % y 7.7 % respectivamente.

González asegura que es necesario que el Gobierno trabaje por dar una respuesta a las familias y evitar que migren, pero también dar solución a los salvadoreños que están amparados bajo el Estatus de Protección Temporal (TPS, en inglés) porque El Salvador no está en condición de recibir a esta población.

“Se le pide al gobierno atender a la gente que está en Estados Unidos, ayudarles en el proceso para que puedan obtener su residencian, pero no decirles que se preparen para regresar en el país porque no tenemos como atender a esa población. Se debe de trabajar por mejorar la situación económica, de empleo, educación. Si existen las políticas del Gobierno deben de empezar a implementarse”, dijo.

Desplazamiento forzado

Pero la migración irregular no es el único problema social de El Salvador, González señala que la pandemia podría desencadenar el aumento del desplazamiento forzado de las familias salvadoreñas porque los índices de inseguridad van en aumento y están relacionadas al control que tienen las pandillas en el territorio nacional, así como la exigencia de la renta o amenazas la seguridad familiar.

“A nivel interno también hay desplazamiento porque las pandillas y organizaciones criminales se mantienen en los territorios y están desplazando a la gente, exigiendo la renta de los lugares donde residen y está demostrando que son ellos los que tienen el control territorial y no la policía. La policía lo que hace es acompañar en su desplazamiento, pero no acompañar donde residen”, enfatizó.

“Sabemos que existen el desplazamiento, hay familias que tienen que esconderse. El Estado no está brindando información, no tienen datos. Si el Gobierno tiene un plan territorial deberían de hacerlo efectivo y que no sucedan estas cosas, el desplazamiento se da por el cobro de la renta”, concluyó.