Las fronteras terrestres levantaron las restricciones para el ingreso de extranjeros a El Salvador a partir de este lunes; sin embargo, están obligados a presentar el resultado negativo de una prueba PCR para que las autoridades les permitan su ingreso.
En la frontera Las Chinamas, en Ahuachapán, no hubo afluencia de personas, respecto a la que esperaban las autoridades ya que hasta media mañana sólo habían reportado 40 ingresos; de los cuales 34 fueron extranjeros y solo cuatro nacionales.
En tiempos sin pandemia el flujo de usuarios oscila entre las 800 y 1,000 personas cada día.
El guatemalteco Irvin Alvarado, quien se dirigía a San Salvador, comentó que se sometió a la prueba PCR el viernes en la mañana y que el resultado se lo dieron en día y medio.
“No veo ningún problema; siempre y cuando uno cumpla con los requisitos no va haber ningún inconveniente con nadie. (Durante el tiempo que la frontera estuvo cerrada fue) bastante complicado, tanto para los que van de viaje, (o) van ida y vuelta; ya primero Dios todo vuelve a la normalidad aunque todo cuesta pero va poco a poco. Depende de nosotros el que todo esto mejore porque si no ponemos de nuestra parte como personas no va a mejorar esto”, expresó el extranjero.
Fuentes en dicha frontera señalaron que a los salvadoreños no le piden una prueba PCR, únicamente a los extranjeros.
Además aclaró que los meses anteriores, las fronteras estuvieron abiertas para el paso de los salvadoreños y que la restricción únicamente fue para los ciudadanos de otros países.
Por ello, señaló que en el caso de las fronteras no se habló de reapertura; sino que levantamiento de las restricciones para el ingreso de extranjeros.
“La prueba COVID PCR se le pide a los extranjeros que no son ni diplomáticos, que no son tripulantes, menores de dos años, y a los salvadoreños obviamente”, manifestó la fuente que no reveló su nombre por no estar autorizado a dar información.
Uno de los pocos salvadoreños que ingresó al país por la frontera Las Chinamas fue el sacerdote Isaís Lue, quien ejerce en la parroquia San Juan Bautista, del municipio de Moyuta, Jutiapa.
El religioso expresó que desde el 3 de marzo no había viajado a El Salvador; pero que tras el levantamiento de las restricciones de ingreso, optó por viajar para visitar a su familia.
“Si piden el PCR me lo hubiera hecho porque también me indica una seguridad responsable para llegar a mi casa y visitar a mis familiares”, expresó.
Agregó que cuando regrese a Guatemala deberá de presentar, en dicho país, la prueba PCR ya que es un requisito. Miembros del Ministerio de Salud llegaron a la frontera para tomar la temperatura a los usuarios, a quienes también le recordaban las medidas de bioseguridad que deben de seguir para evitar posibles contagios de COVID-19.
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