Para el 14 de septiembre, el sitio covid19.gob.sv reportó 3.8 millones de primeras dosis y 3.1 de segundas dosis aplicadas. Eso indica que hay aproximadamente 700,000 personas que han recibido primeras dosis y que, al 14 de septiembre, estaban pendientes de completar el esquema de vacunación.
Debido a que el gobierno no publica información de vacunación por grupos etarios y municipio de residencia es imposible saber cuántas personas mayores de 60 años, por ejemplo, aún no se han vacunado; y lo mismos ocurre con el resto de grupos etarios.
Anteriormente, médicos consultados han advertido que es necesario implementar campañas informativas que animen a las personas a vacunarse contra la covid-19, pues de lo contrario será difícil alcanzar la meta de aplicar las dos dosis al menos al 70 % de la población. Para esto, el pediatra, epidemiólogo y salubrista Wilfrido Clará considera que “se necesita saber cual es la prevalencia de la población que no está dispuesta a vacunarse contra COVID-19, la que aún está indecisa y la que está anuente a recibirla pero que por diferentes circunstancias no ha podido ir por ella”.
Con el apoyo de Facebook, El Programa Conjunto de Metodología de Encuestas de la Universidad de Maryland es el responsable de una encuesta en la que se ha preguntado a miles de usuarios de todo el mundo “Si hoy te ofrecieran una vacuna para prevenir el COVID-19, ¿te vacunarías?”. Para el caso de El Salvador los resultados, indican que el 32 % de los consultados estaba indeciso sobre vacunarse al momento de responder la encuesta. El porcentaje, con un 95 % de índice de confianza, es el resultado de 51,883 respuestas recibidas a través de Facebook entre el 10 de enero y el 4 de septiembre.
Ese porcentaje de indecisión ha variado a lo largo del año: siendo el más bajo de 11 %, la semana previa al 25 de abril y la semana previa al 16 de mayo; y el más alto del 36 %, la última semana de agosto. La encuesta se centra en identificar la indecisión a vacunarse y no el rechazo a la vacuna entre los no vacunados.
El porcentaje de indecisión, al analizarlo por género y rangos de edad, es mayor en hombres que en mujeres; y menor en el rango de edad de 18 a 24 años, con un 23 % de porcentaje de indecisión.
Los más indecisos a vacunarse han sido las personas de 45 a 64 años, con un porcentaje de indecisión del 45 %. Al respecto, Clará considera que “es importante aclarar cuánto de esto es resistencia (o sea, no se va a vacunar) o indecisión”. “El 36% de resistencia me parece demasiado alto, quizás este porcentaje es combinando indecisión y resistencia”.
Los resultados de la encuesta no sorprenden al intensivista José Gonzálo Batres Baires: “Creo que son acordes a lo esperado, van con la lógica que el remanente ciudadano no vacunado es el segmento más duro de convencer en la población. En este grupo van quedando los adultos mayores de 45 años que desde el principio rechazaron la vacuna, así que a medida pasa el tiempo y los más jóvenes sean vacunados, su porcentaje será más relevante”.
Entre los motivos de la indecisión sobresalen la preocupación por los efectos secundarios, con un 50 %; el querer esperar a ver si es segura la vacuna, con un 49 %. Mientras que un 36 % de los encuestados respondió “no sé si funcionará”. En este caso, los porcentajes son el resultado de 2,095 respuestas obtenidas entre el 1 y el 31 de agosto.
Cuando a estos encuestados se les preguntó ¿cúal es su fuente de información más confiable sobre el covid-19? el 23 % respondió que son los médicos. “Esto es interesante”, afirma Clará: “Podría esperar que fueran las redes sociales o medios de comunicación impresos o TV”.
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Médicos piden campaña para fomentar vacunación
Aunque ya el 49% de la población ya tiene las dos dosis, hay 700,000 personas con una dosis y pendientes de recibir la segunda dosis; además el ritmo de vacunación de primeras dosis se ha vuelto lento en los últimos días.
Por ello, médicos como Batres Baires consideran necesario que el gobierno implemente campañas que fomenten la vacunación, más allá de los anuncios en televisión, radio y redes sociales.
“Si además del grupo etario, supiéramos más datos sociodemográficos de las personas no vacunadas, podríamos sugerir estrategias que vuelvan atractiva la vacunación. Es probable que la realidad del ciudadano no vacunado no le permita asistir a una cita de vacunación”, considera.
"Se necesita saber cuál es la prevalencia de la población que no está dispuesta a vacunarse contra la covid-19, la que aún está indecisa y la que está anuente a recibirla, pero que por diferentes circunstancias no ha podido ir por ella".
El intensivista cree que el Gobierno necesita implementar estrategias novedosas para llegar a esta gente y, además, trabajar con las municipalidades. Por ejemplo, sugiere que en el área rural, donde hay menos vacunados, se organicen eventos gastronómicos o festejos comunales, que vayan acompañados de un equipo móvil de vacunación. “En la ciudad, las autoridades pueden organizar eventos como conciertos o exposiciones con medidas de higiene y educación, que incluyan equipos de vacunación”, explicó. Esta práctica se ha utilizado en Alemania como medida para facilitar que quienes dudan si vacunarse o no, se decidan a hacerlo.