“Minimizar al estudiante no te hace mejor catedrático”. “La humillación no es una metodología de aprendizaje”. Estos son solo algunos mensajes que estudiantes de la Facultad de Medicina de la Universidad de El Salvador (UES) escribieron en pancartas el 17 de marzo cuando protestaron por el acoso que dicen sufrir en la facultad.
Ante el panorama, el Colegio Médico de El Salvador organizó un conversatorio el pasado 23 de marzo para hablar sobre la ética en la relación docentes y estudiantes de medicina en las universidades, y encontrar soluciones ante los vejámenes que aseguran pasar los estudiantes en la carrera.
La médica psiquiatra y miembro de la Asociación Salvadoreña de Psiquiatría, Dra. Patricia Bernardette Morales aseguró que antes de tomar medidas concretas se debe hacer una evaluación en torno a la relación del docente con los estudiantes. Esto con el objetivo de ir cambiando patrones de conducta en ambos.
VER: Colegio Médico debate sobre la relación ética entre docentes y estudiantes de Medicina
También analizar cuáles son los rasgos de personalidad de los docentes. “Creo que todos hemos pasado por problemas como que estamos sobresaturados en los hospitales, a veces están sobresaturadas nuestras clínicas o a veces tenemos situaciones emocionales o económicas muy difíciles y terminamos explotando en otras personas”, dijo Morales.
Por ello propone que, al ser la carreraº de Medicina una de las más demandadas y con mayor carga de trabajo, es necesario que haya una clínica de salud mental en cada universidad y en cada hospital. “Si yo puedo acercarme a una persona de forma saludable, por qué tengo que utilizar el poder o la agresividad. El abuso se ha normalizado y eso ya no puede seguir ocurriendo”, dijo.
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Por su parte, la Dra. Mirella de Wollants asegura estar trabajando, junto con otros colegas, en la creación de una nueva Ley de Educación Superior que regule los problemas actuales.
También pide que en la Ley Especial para la Regulación de las Prácticas Clínicas de los Estudiantes de Internado Rotatorio, Año Social, Médicos y Odontólogos Residentes en Proceso de Especialización, creada en 2019, haya un artículo donde se le reconozca al estudiante de Medicina “la doble calidad que tiene”.
“Primero tiene la calidad de estudiante y luego la de trabajador porque es un trabajador. Pienso que hay que aprovechar las leyes laborales para protegerlos porque querer controlar hasta lo más mínimo de situaciones humanas es sumamente difícil, pero ya teniendo leyes que los protejan se vuelve más fácil”, agregó.
Dicha ley contempla que los estudiantes de Medicina en prácticas clínicas en la modalidad de internado rotatorio deberían tener una jornada máxima de 10 horas diarias, incluyendo los turnos nocturnos, días festivos y fines de semana. Posterior a los turnos nocturnos no podrán brindar asistencia médica a los pacientes por un periodo no menor a 8 horas, excepto en situaciones de emergencia.
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Todas esas medidas no deben aprobarse sin antes evaluar psicológicamente a todos los tutores, maestros, docentes, residentes y estudiantes de Medicina, agrega. “Es importante realizar cursos obligatorios de sensibilización sobre este tema y de ética en todo el personal de salud”.