Pescador lucha bajo el agua con reptil que lo atacó en El Jocotal

i Vivo de milagro! dice Meani Euripides Sánchez León, de 50 años, quien sobrevivió al ataque de un reptil de más de un metro de longitud, el cual lo atacó cuando pescaba  con atarraya, en la parte del desagüe de la Laguna El Jocotal, en el distrito de El Tránsito, del municipio de San Miguel Oeste, el lunes, a eso de las 3:40 de la tarde.

En El Jocotal habita el cocodrilo americano y el caimán, según informes sobre esa área natural protegida. 

De acuerdo con el relato del pescador,  el lunes  luego de realizar trabajos como albañil, llegó a su casa y se dispuso a ir a pescar;  una  actividad rutinaria para él ya que de lo que pesca se alimenta su familia.

Recuerda que  ese día caminó hasta el Desagüe de la Laguna, que es la parte profunda de El Jocotal y en  donde se encuentran reparando los diques de contención. Antes esa zona era utilizada únicamente para pesca pero ahora  es también usada para turismo.

“En ese momento que yo andaba pescando no lo alcancé a ver, porque yo estaba a la orilla y en la orilla del carril hay monte_; entonces yo estaba entre el monte y el agua. (Él reptil) de allí se salió  (...) yo tenía como unos 10 minutos de estar ahí pescando”, relató Meani.

Recuerda que estaba solo, de pie, con la atarraya en la mano, preparándose  para lanzarla,  cuando sintió que “unas cuchillas" le traspasaron su pié derecho y le arrastraban al agua.

"Entonces, cuando sentí que iba para abajo, le emboqué  el otro pie (golpear con el otro pie). Me soltó de aquí (pie derecho), pero me agarró el pie izquierdo. Entonces, en ese momento me metió al monte y como pude, me abracé de él, porque no me quedaba de otra y luché con él bajo el agua”, narra Meany,

Añade que el animal giró dos veces con él. A Meany se le ocurrió sujetarse del reptil porque de no ser así le hubiese retorcido sus extremidades, cuenta.

Meany dice que su vida estuvo al borde de la muerte ya que pasó varios segundos bajo el agua intentando soltarse del reptil. Debido a la turbidez del agua por la agitación no lograba ver con claridad, lo único que esperaba era una oportunidad para que el animal lo soltara y salir a la superficie a respirar, porque ya no aguantaba, explica.

“De repente no sé qué pasó, se asustó él o no sé pero me soltó y pude salir. Y cuando salí a la orilla, unos señores que cuidan ganado ahí me auxiliaron, ellos me sacaron del agua y al borde, de ahí llamaron a la PNC para que me fuera a traer y me trasladaron a esta clínica”, relató el pescador.

Señala que si el lagarto no lo hubiese soltado o se lo llevaba a la parte más profunda, él no hubiese logrado sobrevivir. Dice que en ese momento en lo único que pensó  fue en sus tres hijos, ya que es padre y madre, desde que ella se fué.

Las personas que lo auxiliaron estaban a varios metros de distancia de él atendiendo el ganado,  y fueron  los gritos del pescador lo que los alertó; sin embargo ellos se acercaron hasta que Meany  logró salir a la superficie. Uno de ellos usó la camiseta que andaba puesta para hacer un vendaje y detener la hemorragia de los pies de Meany, a la espera de que llegara la Policía.

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Según el pescador, lo que le sucedió a él es el primer ataque  a un humano registrado en la zona, y en los últimos años ha visto un aumento en la población de reptiles en la laguna. Añade que los pescadores han sido testigos de que los lagartos (como ellos les llaman)  habían atacado, anteriormente, al ganado y perros pero no a humanos.

Meany  relaciona lo que le sucedió a él con que  el reptil que lo atacó sea una hembra con crías, ya que  esta época del año es de post reproducción. Meani  tiene heridas profundas en ambos pies, y según le indicaron los médicos necesita cuidarse, su recuperación será larga, y su estado puede complicarse de no contar con los medicamentos necesarios, dada su condición de diabetes.

Sin embargo, la principal preocupación del pescador está centrada en que él es el único que lleva el sustento a sus tres hijos, pero dada su condición actual no puede hacerlo. El contacto es el 75878469, si desea ayudarlo.

Los pescadores de la zona de El Jocotal  temen que tras el ataque ocurrido a Meany, los turistas desistan de visitar ese lugar.