5 casos en los que imputados se beneficiaron con un juicio corto

Estos casos ejemplifican el universo de los 17,086 procesados que recibieron leves condenas al someterse al juicio abreviado entre años 2014-2019.

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Ana Ligia de Saca está dispuesta a confesar que lavó $17 millones de las arcas del Estado para evitar ir a la cárcel. Foto EDH/Lissette Monterrosa

Por David Marroquín

2019-04-23 7:33:58

Desde el año 2014 hasta el 7 de abril de 2019,  el sistema de justicia salvadoreño permitió que 17,086 procesados por distintos delitos se sometieran a un procedimiento abreviado para confesar sus delitos y recibir penas menores de cárcel o hacer trabajos de utilidad pública, según datos de la Fiscalía General de la República.

No importa el delito que haya cometido el que solicita el proceso abreviado, lo puede pedir un corrupto confeso como fue el caso de Elías Antonio Saca hasta que el viola a una mejor o el que asesina. Todos ellos forman parte de los más de 17,000 que se acogieron a este recurso legal.

Para este año, en el período del 1 de enero al 7 de abril, los jueces autorizaron 914 procesos abreviados, en los cuales 907 se declararon culpables y fueron condenados y siete más fueron exonerados.

El procedimiento judicial abreviado que establece la legislación penal ha sido establecido para todos los delitos, explicó recientemente a este medio el jefe de la Dirección Contra la Corrupción y la Impunidad de la Fiscalía, German Arriaza.

A propósito de este recurso legal, El Diario de Hoy recopiló cinco casos en los que los imputados confesaron y se aplicó un juicio corto:

1. Hombres aceptaron vínculo con pandilla para no pisar la prisión

Jorge Luis Montoya Gámez y Wilson Omar Catalán recibieron dos años de prisión pero a cambio se someterán a normas de conducta. La condena les fue impuesta en un procedimiento abreviado autorizado en marzo de este año por el Juzgado Antimafia de Sentencia C de San Salvador. Montoya Gámez confesó pertenecer a una pandilla desde 2013, cuyas funciones era transportar armas de fuego y droga en Nueva Concepción, Chalatenango. Catalán confesó que no era pandillero, pero que colaboraba con una mara, en el sentido de avisarles cuando entraba la Policía a la zona. Montoya tendrá que esperar resolución en otros dos procesos que tiene pendiente.

2. Violador de niño admitió su culpa y fue sentenciado a 15 años de prisión

Salvador, de 54 años, confesó haber violado de manera continua a un niño, por lo que fue condenado a purgar 15 años de prisión. La confesión fue parte de las condiciones del procedimiento abreviado al que se sometió, después de que su abogado defensor llegara a un acuerdo con la Fiscalía General. La víctima relató que desde que él tenía seis años de edad, llegaban a visitar a su abuela, en cuya casa también vivía el condenado. Salvador aprovechaba que la mamá lo dejaba en la casa de la abuela y cuando ella salía al mercado, aprovechaba para manosearlo. El condenado comenzó el abuso de manera continua cuando el niño tenía entre los ocho y doce años de edad. En una ocasión, el niño se lo contó a su mamá y puso la denuncia.

3. Condenados a 144 jornadas de trabajo por ayudar a pandilla

Manuel Rosales, Antonio Rivera, Antonio González y Eduardo Henríquez aceptaron que colaboraban con una pandilla que operaba en Zacatecoluca, La Paz. Su confesión fue parte del trato entre sus defensores y la Fiscalía General para someterse a un procedimiento abreviado y evitar ir a la cárcel. El Juzgado Antimafia de Sentencia B de San Salvador los condenó a tres años de prisión, pero fueron sustituidos por 144 jornadas de trabajo de utilidad pública. Los cuatro condenados admitieron ante el referido tribunal que desde 2017 colaboraban con una pandilla por temor y que sus funciones eran avisarle a los pandilleros cuando llegaba la Policía al lugar donde residen.

4. Colaboradores de pandillas aceptaron que daban alojamiento a pandilleros

A 15 personas que colaboraban con pandilleros las sentenciaron a tres años de cárcel, pero por tratarse de una pena menor, se la reemplazaron por 144 jornadas de trabajo público. También se condenó a José Elías Miranda Guzmán a tres años y medio de prisión por organizaciones terroristas. Las condenas les fueron impuestas por el Juzgado Antimafia de Sentencia C en un procedimiento abreviado que fue solicitado por la Fiscalía General y los abogados defensores de los condenados, quienes confesaron los delitos por los que fueron procesados. Ellos declararon que se encargaban de avisarles a los pandilleros cuando llegaban los policías, les daban alojamiento y les guardaban las armas de fuego.

5. Le dan tres años de prisión y le niegan reemplazo de la pena

Melquisedec Alexander Medrano Sánchez, supuesto pandillero de 27 años, fue detenido el 22 de mayo de 2018 en la colonia 22 de Abril de Soyapango. En esa ocasión, los policías le decomisaron 31,730 dólares en efectivo que no pudo justificar su procedencia. El defensor de Medrano Sánchez y la Fiscalía General acordaron que pedirían al Tribunal Segundo de Sentencia de San Salvador, el procedimiento abreviado para el imputado a cambio de confesar el delito de lavado de dinero. Medrano dijo que era producto de la venta ilegal de teléfonos celulares. El juez lo condenó a tres años de prisión y le negó el reemplazo de la pena porque no tiene domicilio ni registro de a qué se dedica.