Para comprender el impacto de la covid-19 en El Salvador, y cómo las personas están aceptando -o rechazando- la vacunación contra el nuevo coronavirus, varias organizaciones de la sociedad civil unieron esfuerzos para desarrollar una encuesta a nivel nacional, entre el 31 de agosto y el 3 de septiembre pasados, que abarcó a 1,241 personas iguales o mayores a los 18 años, en los 14 departamentos del territorio.
Los datos que arrojó la encuesta revelaron que 71.6% ya recibió dos dosis; el 10.2% una dosis y el 17.3% no se ha vacunado. “Son porcentajes que coinciden con los datos que ha dado a conocer el Gobierno”, detalló Óscar Picardo, de la Universidad Francisco Gavidia.
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Esto viene a reconfirmar que dos de cada diez no han recibido todavía ninguna dosis de biológico para inmunizarse, lo que les convierte en factores de riesgo para los demás, y también les coloca en una posición frágil, pues son las vacunas las que alejan a las personas del desarrollo grave de la enfermedad, la hospitalización y la muerte.
El Gobierno tiene datos sobre vacunación en covid19.gob.sv, y hasta el 12 de octubre menciona que el sistema de salud ya aplicó 4,208,954 primeras dosis, 3,579,009 segundas dosis y 243,969 terceras dosis (de refuerzo).
En cuanto al conocimiento de estos efectos que tienen las vacunas anticovid en las personas, el estudio también arrojó un dato preocupante, pues el 14% cree que al vacunarse podrán “curarse del virus”, lo cual está equivocado.
En este apartado, el 13% opinó que vacunarse servirá para “acabar con la pandemia”, el 49% que será para “evitar que la gente llegue a cuidados intensivos” y el 34.8% que “evitará que la gente fallezca”. Estas últimas tres opciones sí son correctas, y son justamente los efectos que los fabricantes de las vacunas buscan en la población.
Fallecidos: diferencias
En cuanto a cómo ha impactado la enfermedad en el entorno de las personas que participaron en esta sondeo, el 12% de los encuestados dijo haber perdido a un familiar por la covid-19, y el 21% perdió a un amigo cercano. Esto significa que al menos tres de cada 10 salvadoreños ha enlutado por la covid-19 en lo que va de pandemia, que comenzó a impactar en la población nacional en marzo de 2020.
Este dato choca de lleno con los datos oficiales de la administración Bukele, que reportan solo 3,420 fallecimientos relacionados con el virus hasta el 12 de octubre.
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En todo caso, el estudio también sustentó que la mayoría de la población ve con esperanza seguir con la vacunación.
Ante la pregunta, ¿cuál es su percepción en torno al tema de vacunas contra covid-19?, un 72.7% respondió que considera que es el camino para terminar con la pandemia. Sin embargo, un 7.4% dijo sentir temor en estos biológicos, pues consideran que tienen “cosas ocultas”; y un 12.7% expresó que “no confía” en las vacunas.
El tema de las “cosas ocultas” tiene que ver con las fuentes de información que está consultando el público, dado que vivimos bajo una avalancha constante de datos, rumores y mitos acerca del SARS-CoV-2 y las vacunas.
El 54.1% expresó que se ha informado al respecto a través de redes sociales como Facebook, Whatsapp, Twitter, Instagram, etc., en las cuales las “fake news” o noticias falsas están a la orden del día, muchas veces sin base científica ni contraste periodístico.
Mientras que el 55.8% dijo que ha buscado datos en medios tradicionales como televisión, radio y periódicos; el 12.8% consultó con médicos; 19.6% preguntó a amigos y 10.5% a vecinos.
La herramienta estadística también ha permitido comprender mejor el perfil de la población no vacunada. De las razones que detallaron las personas que no han recibido el biológico, pueden resultar ajustes en las estrategias para que puedan entrar al esquema de inmunización.
Un 24% no dio respuesta a por qué no se ha aplicado el biológico; los que sí contestaron dieron variados argumentos: 11% no lo considera necesario; 17% tuvo problemas de horario; 21% tiene temor a una reacción no deseada; 9% está confundido con la información; 6% por los horarios en los centros de vacunación; 4% porque vio molestias en familiares o conocidos tras recibir la vacuna; 8% duda sobre la efectividad de las vacunas; 6% tiene una enfermedad concurrente; un 4% por la distancia al centro de vacunación; un 3% por embarazo; y el 1.8% por falta de transporte.
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Más Coronavac
La mitad de la población ha recibido la vacuna Coronavac, del laboratorio chino Sinovac, de acuerdo a esta encuesta.
Aunque el Gobierno no ha informado a detalle en qué porcentaje ha aplicado dosis de cada fabricante entre la población, la encuesta arrojó los siguientes resultados: 49% recibió Coronavac; 22% Moderna, 9.9% AstraZeneca y 8% Pfizer.
En la encuesta no apareció Sinopharm, vacuna china que también es administrada en El Salvador; los organizadores del sondeo explicaron que esto se debe a que ha sido ocupada recientemente para vacunar a menores entre 6 a 12 años, fuera del rango de tiempo en que se desarrolló la medición.
También es relevante el elevado nivel de confianza que hay en las vacunas: la encuesta consultó qué tanto cree la población en la calidad de los biológicos, y de mayor a menor los porcentajes fueron los siguientes, de acuerdo al fabricante: 74% Coronavac (China), 71% Moderna (EE. UU.); 66% Pfizer (EE. UU. - Alemania); 60% Astra Zeneca (Inglaterra-Suecia) y 30% Sputnik (Rusia, aunque no se administra en el país).
Hay otro punto que ya ocurre en otros países, y es la exigencia de mostrar cartilla de vacunación para entrar a ciertos lugares, como parques, cines, eventos culturales o deportivos, etc. Ante esta idea, el 67.2% se mostró de acuerdo en que sea obligatorio, pero el 30.9% consideró lo contrario.
En el mismo orden, ante la pregunta de si el Gobierno debería exigir que la vacunación sea obligatoria para todas las personas que viven en el país, el 64.9% opinó que sí, y el 33.7% consideró que no.
Los principales hallazgos de esta encuesta fueron dados a conocer la mañana de ayer, con la presencia de Elena de Alfaro y Helga Cuéllar-Marchelli, de Fusades; Carla Meyer, de la Fundación Rafael Meza Ayau; Marvin Melgar, de Coexport; Milton Brizuela, del Colegio Médico y Óscar Picardo, del departamento de Ciencia, Tecnología e Innovación de la Universidad Francisco Gavidia.
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Estas organizaciones apoyaron la ejecución de esta herramienta estadística porque “queríamos tener datos reales de qué es lo que está pensando la población y por qué no se están vacunando” algunas personas, explicó el doctor Brizuela, presidente de la principal gremial de médicos en el país.
Elena de Alfaro, de Fusades, comentó que “a partir de mayo los casos han ido en aumento, esta semana fue cuando se registraron mayores fallecimientos y más personas contagiadas, a pesar de la vacunación”, razón por la que participaron en esta encuesta, para tener datos que lleven a comprender el escenario y para que, a su vez, el Ministerio de Salud y otras instituciones gubernamentales tengan información para la toma de decisiones y ajustar políticas públicas.
Esta encuesta está disponibles en las redes sociales de las organizaciones participantes, que también decidieron impulsar una campaña de información a nivel digital, audiovisual y radiofónico, para que las personas que no se han vacunado modifiquen su pensamiento y acudan a aplicarse el biológico.