Cabecilla de la MS fue sacado por “emergencia médica” del penal de Izalco, sin estar enfermo, por orden de Centros Penales

El periódico digital El Faro reveló que un asistente del director de Centros Penales autorizó la salida del pandillero al hospital de Zacatecoluca sobrepasando la recomendación del médico del penal de máxima seguridad Izalco fase III de que no requería de atención médica de emergencia.

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Fachada centro penal de Izalco, Sonsonate. Foto Archivo EDH / Foto Por Archivo

Por David Marroquín/Periódico digital El Faro

2021-01-13 2:13:02

Danilo Antonio Colocho Hernández, apodado Chino Milo, es un cabecilla de la mara Salvatrucha (MS)  que fue sacado por “emergencia médica” del centro penal de máxima seguridad Izalco fase III, sin estar enfermo, por orden de las autoridades de Centros Penales, según reveló el periódico digital El Faro.

La salida de Colocho Hernández se dio en octubre pasado a pesar de que el médico del referido recinto penitenciario, certificó que el recluso gozaba de “un perfecto estado de salud” y para ello lo dejó asentado por escrito en un documento oficial de la Dirección General de Centros Penales para evitar problemas legales posteriores.

Lo que más generó sospechas de que la salida del cabecilla de la MS era anómala, es que Colocho Hernández tuvo que recorrer 128 kilómetros desde el referido recinto penitenciario en Izalco hasta el hospital nacional Santa Teresa en Zacatecoluca, La Paz.

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Además a 12 kilómetros del penal de Izalco se encuentra el hospital Mazzini de Sonsonate, donde atienden a la población reclusa de esa cárcel por cualquier emergencia médica.

Curiosamente en Zacatecoluca se encuentra el centro penal de máxima seguridad conocida como Zacatraz, en el que están recluidos los principales cabecillas de las pandillas y del crimen organizado.

Lo que llama la atención, detalla la publicación de El Faro, es que la salida de Colocho Hernández del penal de Izalco bajo la excusa de ser emergencia médica se dio un mes después de que ese periódico digital revelara que el gobierno tenía un año de estar negociando con la pandilla MS la reducción de homicidios y el apoyo electoral para el partido Nuevas Ideas en las elecciones del próximo 28 de febrero a cambio de beneficios carcelarios y económicos para los cabecillas pandilleriles.

El fiscal general, Raúl Melara confirmó a El Faro que el Chino Milo es parte de la cúpula de esa organización criminal y “mano derecha” de Borromeo Henríquez apodado Diablito de Hollywood.

“No solo tiene un amplio y diverso historial delictivo, también aparece en la élite de la pandilla más cruenta y mejor organizada del país. Es el brazo derecho y operador del líder”, dijo Melara a El Faro.

Trasladado por orden superior a hospital de Zacatecoluca
A las 11:20 de la mañana del 6 de octubre pasado, el inspector Jairo Solís buscó al médico responsable de la salud de los reclusos, Mario Arnulfo Herrera Espinoza, para decirle que por “indicación superior” tenía que remitir de urgencia al recluso Colocho Hernández a un hospital, pero no a cualquiera, sino que al hospital de Zacatecoluca, La Paz.

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El Faro asegura que cuenta con documentos oficiales que detallan que el inspector Solís informó verbalmente que la orden había sido girada por César Salinas, colaborador administrativo del director de Centros Penales, Osiris Luna.

El inspector Solís no supo explicarle las razones al médico por las que el asistente de Luna conocía de las necesidades médicas del recluso y de los padecimientos que ameritaban trasladarlo de manera urgente fuera del penal, destaca la publicación.

El doctor Herrera se apresuró a hacer su propio diagnóstico en la clínica del penal. Lo que le llamó la atención al médico es que Colocho Hernández estaba “alerta y atento”, que no tenía fiebre ni dificultades para caminar.

Además tenía un peso normal, que estaba rehidratado , que no presentaba palidez ni ningún síntoma de tuberculosis pulmonar.

Al revisar su historial médico encontró que había sido diagnosticado con colon espástico, o síndrome de colon irritable. Además había tenido mucho colesterol en la sangre y padecido de pterigión, que es una membrana que crece en el ojo y dificulta la visión.

Pero esos padecimientos le habían sido diagnosticados hacía 8 años, es decir, en el año 2012, y los que habían sido controlados con los tratamientos médicos requeridos.

Fue entonces que el médico Herrera recomendó que “el paciente por el momento no necesita ser referido de emergencia hacia ningún centro asistencial”.

Para descartar cualquier posibilidad de que Colocho Hernández requería que fuera trasladado de emergencia, Herrera consultó con el Departamento de Odontología del penal y ahí le dijeron que no nada que ver con el asunto.

Previendo de que fuera a tener problemas legales en el futuro, el médico le envió un oficio al director del penal de Izalco fase III, Rafael Antonio Jiménez Ramos, en el que le relataba lo ocurrido.

“Debo mencionar que como médico coordinador de este recinto penitenciario me veo en la dificultad de no tener un respaldo por escrito en donde solicitan salida de privado de libertad, ya que según mi evaluación médica no necesita ser referido de emergencia, poniendo en riesgo mi profesión como médico al no tener un respaldo sobre la situación anteriormente mencionada”, concluyó Herrera.

El Faro asegura tener copia de ese oficio y que corroboraron su autenticidad con informantes de Centros Penales.

El periódico digital asegura que el 12 de enero pasado se comunicaron con el médico Herrera a través del conmutador del penal y cuando respondió se le dijo que tenían la copia del oficio que la había enviado al director del penal.

Sin embargo, el médico se limitaba a asentir, pero cuando se le preguntó sobre el perfil criminal del Chino Milo, entonces se cortó la llamada. Se volvió a intentar, pero la recepcionista dijo que el doctor ya se había retirado, según El Faro.

La jueza Segundo de Vigilancia Penitenciaria de San Salvador, Ana Ruth González Navarro aseguró que ella no había dado la autorización para que el Chino Milo saliera del penal al hospital.

“No he autorizado ninguna salida de la prisión porque nadie me lo ha pedido. En el juzgado no consta ni existe registro de ninguna salida o certificación médica de que el privado de libertad necesita de un proceso de salud”, le dijo González Navarro a El Faro.

Ella es la responsable de darle seguimiento a las condenas que Colocho Hernández debe de cumplir.

“Deberían de haberme informado porque este juzgado es el responsable de darle seguimiento, pero no he recibido ninguna comunicación oficial”, dijo la jueza.

Agregó que algunos directores de penales informan cada salida de un reo, pero que esta administración de Osiris Luna, se ha caracterizado por no informar de traslados o salidas de los privados de libertad.

El Faro asegura que se comunicó con César Salinas, el 12 de enero pasado, para preguntarle las razones por las que él había ordenado el traslado de Colocho Hernández, entonces Salinas colgó y ya no volvió a responder las llamadas, según el periódico digital.

También aseguró que le llamaron al teléfono celular del director Osiris Luna, pero que el periodista de El Faro alcanzó a saludarlo y el funcionario cortó la llamada y tampoco volvió a contestar su teléfono.

Colocho Hernández cumple una condena de 176 años de prisión que el juzgado sexto de sentencia de San Salvador le impuso por haber asaltado a 17 personas para robarles su vehículo y haber asesinado a un integrante de una organización criminal.

En 2013 se le sumaron ocho años más porque estafó al dueño de una retroexcavadora y comprársela, en contubernio con otros dos pandilleros, con un cheque falso. Esto último lo hizo aún estando recluido en el penal La Esperanza conocido como Mariona.