En la concentración frente a la plaza Morazán en el Día del sindicalista salvadoreño, el grupo el Taller Inestable de Expresión Teatral (TIET) realizó una intervención artística para recordar el atentando en la Federación Nacional Sindical de Trabajadores Salvadoreños (FENASTRAS) el 31 de octubre de 1983.
En la explosión provocada con dinamita murieron nueve sindicalistas, entre ellos la dirigente Febe Elizabeth Velásquez.
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El performance en el que los artistas homenajeaban a las víctimas de se atentado fue interrumpido por una mujer que tomó control del micrófono sorprendiendo a los actores y al público. "Me llamo Reina Elizabeth (...) ando borracha yo lo sé, pero creo que es justo que den más oportunidades a los jóvenes", expresó entre lágrimas.
"Me he esforzado toda la vida y he sido prostituta", se lamentó la joven de cabello teñido de rubio y ataviada con un traje ajustado y tacones.
"Qué vivan las mujeres" le contestaron las personas que estaban concentradas en una muestra de apoyo. La mujer que dijo se dedica al trabajo sexual fue inmediatamente abrazada por Jennifer Valiente, directora y gestora cultural de TIET.
"Eso es la voz del pueblo, eso es lo que el pueblo tiene que decir, y eso también es parte de la historia" improvisó el actor Arnoldo Hernández ante el aplauso de los concurrentes.
Luego la actuación continuó, la cual finalizó con "Prohibido olvidar" haciendo referencia a los ataques que la lucha sindical ha recibido por décadas en el país.