Atención psicológica, actividades educativas con niños, capacitaciones a emprendedores para que reestructuren sus iniciativas, entrega de capital semilla, cultivo de hortalizas, granos básicos y entrega de silos metálicos para el almacenamiento de alimentos, son las medidas que implementará a nivel nacional la ONG Ayuda en Acción, después que termine la emergencia provocada por el COVID-19 y que servirán para que muchas familias de las zonas rurales del país retomen sus vidas tras la cuarentena domiciliar obligatoria que inició el 21 de marzo.
Esto es parte de una segunda fase de atención que brinda la organización no gubernamental española, donde invertirá 200,000 Euros ($218,354).
El Director de País, Michael Sambrano, explicó que para agosto tienen previsto brindar atención psicosocial de forma grupal e individual a 600 personas, la mayoría menores de edad y mujeres; y realizar otras 468 actividades educativas.
También harán acciones para proteger y recuperar los medios de vida, por lo que realizarán capacitaciones a personas que integran pequeños emprendimientos, a quienes les darán capital semilla para que reestructuren iniciativas y comiencen a funcionar.
“Esperamos que 300 familias puedan cultivar y almacenar alimentos básicos que les lleven a hacer más sostenible su emprendimiento o la economía de su hogar; básicamente esa es la estrategia que tenemos prevista. En primera instancia estamos previendo fortalecer la producción de hortalizas y de granos básicos; luego con esa producción, la idea es equipar a las personas con silos metálicos para que puedan ir generando reservas de alimentos que les sirvan para estos momentos de emergencia y (en) su vida cotidiana”, dijo Sambrano.
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Ayuda en Acción es una iniciativa que tiene presencia en 22 países y en El Salvador está desde hace 30 años, donde han ejecutado proyectos de mejoramiento de la calidad de educativa, promoción de los derechos de la niñez, adolescencia, y de las mujeres.
La entidad atiende a 23,307 personas, que conforman 5,837 familias que residen en 156 comunidades de 17 municipios del país, entre ellos Tacuba, El Congo, Coatepeque, San Vicente y La Paz.
Ante la emergencia por la pandemia también se han sumado a ayudar a las familias más afectadas para prevenir y aliviar las afectaciones; además de apoyar a las instituciones. Por ejemplo, han entregado equipo de bioseguridad y materiales de desinfección a establecimientos de salud.
Asimismo, ejecutan dos campañas de sensibilización; una está orientada a la prevención de violencia contra los niños y las mujeres y la otra está enfocada a prevenir el contagio del coronavirus.
También están distribuyendo 5,837 paquetes de higiene a las familias rurales e igual número de canastas de alimento, previsto les dure un mes ya que están compuestas por 14 libras harina de maíz, 10 de frijol, 10 de arroz, 10 de azúcar, 2 litros de aceite, 2 libras de sal, entre otros productos.
José Blandón, residente de la playa El Espino, en Usulután, expresó que debido a la situación de la emergencia no pueden salir a pescar, por lo que, como otros beneficiados, agradeció a la entidad por la ayuda que están recibiendo.
“La gente en las comunidades en las que hemos andado, han estado cumpliendo las medidas; pero se han visto afectados por temas de acceso, como son comunidades rurales que están muy alejadas de los territorios, se han visto afectadas en el ingreso de productos de primera necesidad”, explicó Sambrano.
En la primera fase que están ejecutando harán una inversión de 300,000 Euros ($327,531).