El tema del presupuesto asignado por el Ejecutivo a la Universidad de El Salvador para 2021 ha estado en medio de una ola de interrogantes. Primero, a mediados de agosto, el Ministerio de Hacienda notificó a las autoridades universitarias que habría una reducción de $3.6 millones; pero en cuestión de días el presidente Nayib Bukele dijo que, al contrario, habrá un refuerzo de $10 millones. Pero, ¿en qué se invertirá ese refuerzo? Según explica el vicerrector académico Raúl Azcúnaga, el Gobierno no lo está dirigiendo hacia lo que la universidad realmente necesita, y tampoco los han incluido en la decisión.
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El Diario de Hoy entrevisto al académico para profundizar en este desencuentro entre el principal centro de estudios superiores del país y el Ejecutivo.
Doctor, ¿en qué situación se encuentra ahora el tema del presupuesto para la UES en 2021?
En el proyecto de presupuesto que Hacienda presentó a la Asamblea Legislativa, la Universidad de El Salvador, tal como lo anunció el presidente, lleva un incremento de $10 millones. Es $1.8 destinados al gasto corriente, y el resto, $8.2 millones, a inversión en infraestructura.
¿Y qué opinan de esta distribución?
Como universidad, reconocemos el esfuerzo del Ejecutivo en invertir en la universidad. Sin embargo, no compartimos los rubros en los cuales se está destinando el refuerzo. En términos reales, solo $1.8 millones es el incremento al presupuesto, porque la inversión en infraestructura solo se desembolsa una sola vez. Para 2022, ya no vendrían $8.2 millones que se están asignando a infraestructura en el 2021.
¿Han tenido acercamientos con el Ejecutivo para abordar el tema?
Hemos pedido las audiencias respectivas con el Ministerio de Hacienda, con la ministra de Educación, con el Ejecutivo, para que orientemos hacia qué rubros creemos que se debe invertir esos $10 millones.
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¿Y conocen el detalle de cómo se invertirán esos $8.2 millones en infraestructura universitaria?
De momento, en el presupuesto general, que es el que conocemos y se ha hecho público, y que por ley de transparencia se tiene que hacer público, solo aparece el rubro de $8.2 para inversión en infraestructura, porque no fuimos escuchados en lo que pedíamos y necesitábamos. Y no hemos tenido de parte del ministro de Hacienda una información escrita, que nos diga directamente de cuánto es el incremento y en qué rubro va.
Estamos a expensas de lo que se publica en los medios o en las redes sociales, y no en un mecanismo formal de notificación, que nos pueda dar garantía de que las cosas son como el funcionario dice que son, o como nosotros las estamos considerando.
Sería importante que el ministro de Hacienda y la ministra de Educación escuchen lo que la universidad de El Salvador requiere. No despreciamos en ninguna manera el apoyo que podemos recibir en un incremento presupuestario, pero nosotros sabemos en dónde nos aprieta el zapato, y en qué áreas necesitamos invertir.
Entonces, ¿en qué se debería invertir ese refuerzo, de acuerdo con las autoridades de la universidad y sus objetivos?
Una de las partes más importantes a invertir es llevar al 100% la gratuidad de la educación superior pública en El Salvador.
Hoy por hoy, la universidad requiere de $3.5 millones para que todos los estudiantes no paguen ni matrícula ni escolaridad. Desarrollamos con los gobiernos anteriores la fase 1, que consistía en que los estudiantes provenientes de instituciones nacionales públicas no pagaran. Afortunadamente, eso se logró: alrededor de 37,000 estudiantes no pagan nada en la UES. Pero nos quedan 15,000 estudiantes que sí están pagando colegiatura y matrícula, y como universidad creemos que el país debe dar ese salto, de manera que esta casa de estudios, la principal del país, pueda garantizar a los ciudadanos su derecho a la educación superior, que es uno de los compromisos del Estado de El Salvador, según los tratados internacionales.
Esos 10 millones queremos invertirlos en más becas para estudiantes, que es otro tipo de requerimiento, no solo que no pague, sino que el Estado le garantice al estudiante de más alto rendimiento académico, pero de necesidades socioeconómicas demostrables, que el Estado les financie su manutención en términos de alimentación y viaje, si es requerido.
¿En qué otros proyectos debería invertirse el refuerzo económico?
Estamos pidiendo que venga un fuerte componente para la inversión en desarrollo y equipamiento tecnológico. Si queremos transitar de la universidad presencial que hoy tenemos a una universidad digital, lógicamente tenemos que tener mejores plataformas, mayor conectividad, mayor equipamiento, de manera que no esté lejano pensar que no solo a los niños de las escuelas se les puede dar una computadora sino también a un universitario que la requiera y que no tiene en su casa.