Policía se desvincula de muerte de niño de 10 años en Ilopango y Fuerza Armada detiene a soldados

El niño jugaba con unos amigos a la orilla de la línea férrea en la comunidad Adesco Flores, cuando se escuchó un balazo y el menor de edad cayó al suelo

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Familiares relataron que varios policías que "andan con uniformes grises" hicieron unos disparos a un supuesto pandillero que corría. Foto EDH/Ricardo Flores

Por Diana Escalante / Liseth Alas

2018-12-19 4:50:58

Las autoridades aún no han esclarecido el caso de Samuel, un menor de 10 años que presuntamente murió de un disparo mientras jugaba con unos amigos, hecho registrado la noche del martes 18 de diciembre en la comunidad Adesco Flores, en el municipio de Ilopango.

Familiares y vecinos del niño aseguraron que él y otros dos menores de edad jugaban a la orilla de la línea férrea cuando varios policías que “andan con uniformes grises” hicieron unos disparos a un supuesto pandillero que corría a varios metros y una bala alcanzó a Daniel.

El jefe de la Subdelegación de la Policía Nacional Civil de Ilopango, Ricardo Carrillo, rechazó este miércoles el involucramiento de policías en el homicidio del niño.

Al niño le gustaba el fútbol y de hecho jugaba en el equipo infantil de la comunidad, dijeron familiares. Foto EDH/Ricardo Flores

Residentes de la comunidad, indignados, responsabilizaron a policías de la Sección Táctica Operativa (STO) de la muerte del menor de edad, por lo que pidieron a la Fiscalía y Procuraduría de los Derechos Humanos que investigaran el caso.

Carrillo explicó que un grupo de agentes y militares que hacían un patrullaje de rutina en la zona llegaron a la escena tras ser alertados de que había una persona herida de bala. Además, hicieron coordinaciones con la Cruz Verde para que pudieran trasladar a la víctima al hospital, pero cuando los socorristas llegaron el niño ya había muerto.

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Al niño le gustaba el fútbol y de hecho jugaba en el equipo infantil de la comunidad. Las autoridades realizan una inspección para encontrar a los responsables del confuso hecho.

“Queremos ser categóricos de que la Policía Nacional Civil respondió a un llamado de emergencia de que había una persona lesionada. Hay una investigación, como en cualquier homicidio, pero en este caso queremos desvirtuar y ser serios a raíz de las publicaciones en los periódicos y prensa escrita en donde se está señalando a miembros de la institución como responsables del asesinato de este menor”, sostuvo el delegado policial.

Luego matizó que la institución se “desvirtuaba preliminarmente” porque, según él, hay una investigación abierta en la Policía y en la Fiscalía General.

“Queremos pedirle a la comunidad que nos permitan como Policía que las instancias puedan hacer su trabajo, porque hay muchas cosas que se han dicho, de parte de la comunicad, pero todo eso hay que investigarlo para que este caso pueda esclarecerse y saber verdaderamente qué es lo que ha pasado. Pero preliminarmente, como Policía Nacional Civil, la versión de nosotros es que cuando llegamos al lugar para poder auxiliar a un niño de 10 años, el cual estaba herido y falleció en el lugar”, expresó Carrillo.

Por este hecho, a decir del delegado policial, no hay agentes detenidos.

Personal militar detenido en vías de investigación

Por su parte, el ministro de la Defensa, general David Munguía Payés, manifestó que investigan al personal militar que apoyaba a la Policía en el lugar donde supuestamente se generó una balacera con pandilleros.

“El personal (militar) que estaba en la zona está detenido para investigación, pero en este momento la versión más clara que tenemos es que hubo un enfrentamiento con pandillas en ese sector, donde participamos nosotros (militares) y Policía”, señaló.

 

Agregó que “supuestamente se está diciendo que uno de los disparos de uno de nuestros elementos chocó y salieron astillas (esquirlas) y una de ellas le cayó al niño, pero eso todavía no lo hemos corroborado”.

La Fiscalía no ha brindado información sobre el hecho y la PNC pidió este miércoles tiempo para “esclarecer el caso con el Ministerio Público”.

Samuel acababa de terminar su cuarto grado de estudios y el próximo año iría a quinto grado, de acuerdo con sus familiares. Además, le gustaba el fútbol y de hecho jugaba en el equipo infantil de la comunidad, comentaron.

Para aprovechar su tiempo libre por estar de vacaciones, el niño trabajaba como cortador de hilos en un taller de costura del lugar, detalló uno de sus familiares.

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Los pandilleros la obligaban a cobrar diferentes cantidades de dinero, que después era entregado a ellos.