Un nuevo caso de desaparición se ha registrado en la Policía Nacional Civil, esta vez se trata del agente José Arturo Castillo, de 45 años de edad, destacado en la División Central de Investigaciones (DCI).
De acuerdo con informes policiales, el agente que está asignado temporalmente a la DCI en el área de Trata de Personas, fue reportado como desaparecido por su esposa este 24 de diciembre.
La señora manifestó a las autoridades que este día a la 1:30 de la madrugada su esposo se comunicó vía celular con ella y le manifestó que se movilizaba en un taxi y que pasaba por un centro comercial en Soyapango a la hora de la llamada y que se dirigía a su casa.
Sin embargo, el agente Castillo no llegó a casa como se lo había dicho en la llamada telefónica. Este día la mujer fue a la delegación de Soyapango y alertó de lo sucedido a las autoridades para que se inicie el proceso de búsqueda.
Con Castillo, este día -24 de diciembre- se han reportado dos agentes policiales desaparecidos, el anterior caso correspondió a una agente destacada en la División de Protección a Personalidades Importantes.
Se trata de la agente Lesbia Yesenia Castro, conocida como Lesvia Susana Miguel fue reportada por sus compañeros como desaparecida este 24 de diciembre. La policía estaba destacada en la Sección Disciplinaria, de la División de Protección a Personalidades (PPI).
Otro agente reportado como desaparecido es Abelio Antonio Zelaya, quien fue visto por última vez en el municipio de Soyapango, el pasado 3 de diciembre.
Fiscalía registra un total de 2,993 personas desaparecidas de enero al 30 de noviembre de 2019. El caso más reciente ha sido el de Julio Alfredo Hernández Portillo,un joven de 20 años que trabajaba de empacador en un supermercado de Soyapango, el 17 de diciembre. El muchacho salía de su jornada laboral entre las 11:30 y 12:00 de la noche, del supermercado donde laboraba rumbo a su casa cuando ya no lo volvieron a ver más.
A la fecha, nadie ha dado información del muchacho que permita encontrarlo, pero si han existido algunos oportunistas que han intentado extorsionar a sus padres, en uno de los casos llamaron desde un número de El Salvador y en el otro, de Colombia.