El teniente de infantería, Mauricio Ernesto Sandoval Sosa, de 33 años, había participado en una misión de apoyo a las Naciones Unidas, por lo cual fue condecorado el 9 de julio de 2018, por el comandante general de la Fuerza Armada, Salvador Sánchez Cerén.
De acuerdo con documentos oficiales, la condecoración fue por “su excelente desempeño profesional en el cumplimiento de la misión oficial con la ONU en Líbano, representando a la Fuerza Armada de El Salvador, contribuyendo a establecer un entorno seguro y estable en esa Nación”, reza el Acuerdo No. 134, del 9 de julio de 2018, mediante el cual se le otorgó el reconocimiento al militar.
Sandoval Soto fue ascendido al grado de subteniente de infantería (luego de cuatro años como cadete de la Escuela Militar) en noviembre de 2011. Posteriormente, el 1 de enero de 2016, fue ascendido al grado de teniente, en la rama del Ejército, según la Orden General de la Fuerza Armada de diciembre de 2015.
El teniente también perteneció al Comando de Fuerzas Especiales (CFE), antes de ser enviado a la misión internacional a Líbano.
Este miércoles, Sandoval Sosa fue enviado a prisión por el Juzgado de Paz de Jayaque, sede judicial en el que la Fiscalía General de la República (FGR) lo acusó de haber asesinado a su novia para cobrar tres seguros de vida.
El silencio de la PNC y de la FAES sobre el “homicidio pasional” de un subteniente
El 24 de diciembre anterior, en un hecho del que poco se ha sabido qué lo originó, el subteniente José Miguel Fuentes de la Cruz, murió a balazos, luego de que (aparentemente) se enfrentara al subinspector de la Policía Nacional Civil, Julio César Olivo Ortiz, y el agente Miguel Antonio Hernández Mejía, quienes también murieron en el acto. De este caso, ni la Policía Nacional Civil (PNC) ni la Fuerza Armada (FAES) han detallado por qué fue que el subteniente iba persiguiendo a los dos policías (que andaban vestidos de civil). Extraoficialmente, tanto fuentes policiales como militares han dicho que la tragedia tuvo su origen por la disputa de una mujer. En documentos de la Fuerza Armada, el homicidio del oficial ha sido clasificado como “pasional”.
Según la Fiscalía, el militar comenzó una relación sentimental con la víctima en el año 2020. Luego el oficial adquirió tres seguros de vida para su novia (cuya identidad no ha sido revelada) por un monto de $60,000. cada uno, en los cuales él era el único beneficiario.
El ministerio público Fiscal ha informado que el 17 de enero de este año, Sandoval Sosa fue a la casa de su novia, domiciliada en Santa Ana, a sacarla a pasear, sin embargo, el cadáver de la mujer fue encontrado en el cantón San Juan Higinio, del municipio de Jayaque.
La Fiscalía asegura que el pasado mes de abril, el teniente logró cobrar uno de los tres seguros, y que tiene las pruebas suficientes para probar que Sandoval Sosa mató a su pareja para cobrar los seguros.
A la fecha de su arresto, Sandoval Sosa estaba de alta en la Segunda Brigada de Infantería, con sede en Santa Ana.
En misión con brigada española
Durante su misión en Líbano, Sandoval Sosa fue parte de un grupo de militares salvadoreños que estuvo destacado en un pueblo llamado Ghajjar, como parte de un grupo mayor formado por militares españoles de Canaria, donde los salvadoreños estuvieron recibiendo entrenamiento durante tres meses, antes de partir a Líbano, según consigna el sitio www.laprovincia.es.
El sitio español reseña que Sandoval Sosa perdió a su esposa durante un accidente de tránsito en el mismo año, en 2017.
De acuerdo con el mismo sitio español, el militar salvadoreño viajó a El Salvador para asistir al funeral de su esposa. “Fui a su entierro pero no quise renunciar a la misión. Aquí tengo la cabeza ocupada y, aunque hablo con mi hija todos los días, creo que ha sido lo mejor para mí. Hay que tener en cuenta que para venir aquí había muchos peticionarios y fueron pocos los elegidos. En mi caso, pertenecer al comando de fuerzas especiales me valió de mucho. La selección fue muy dura...”, comentó el militar salvadoreño al periódico español.