Con 48 votos a favor y 5 en contra, la Asamblea Legislativa ratificó este miércoles interpelar al ministro de la Defensa, René Francis Merino Monroy, para el próximo 21 de agosto, para que aclare qué lo motivó a incursionar con elementos del Ejército fuertemente armados al Salón Azul.
La decisión había sido tomada por el pleno el pasado 27 de febrero, sin embargo, se suspendió por el estado de emergencia que se derivó del COVID-19.
Militarización de Asamblea: La contundente condena internacional al fallido golpe
Los diputados advierten desde ya que si el funcionario omite llegar a la Asamblea el 21 de agosto a las nueve de la mañana a rendir cuentas de quién recibió la orden de incursionar con el Ejército al Salón Azul el pasado 9 de febrero y por qué la obedeció sabiendo que eso violaba la Constitución y las leyes, podría ser hasta destituido de su cargo, dijo el diputado Jorge Schafik Hándal, del FMLN.
Con Merino Monroy, son tres los funcionarios del Gobierno del presidente Nayib Bukele, que han sido interpelados por la Asamblea.
Anteriormente, tuvieron que acudir a la Asamblea, la exministra de Salud, Ana del Carmen Orellana Bendek y el presidente de la Administración Nacional de Acueductos y Alcantarillados (Anda), Frederick Benítez, por la insalubridad del agua que la autónoma estuvo distribuyendo a los salvadoreños.
El PCN y GANA no estuvieron de acuerdo en interpelar al ministro de la Defensa. El jefe de fracción del PCN, Antonio Almendáriz, argumentó que los militares lo único que hacen es recibir órdenes.
Sin embargo, la diputada Margarita Escobar, de ARENA, sostuvo que el actuar de Merino Monroy tiene consecuencias jurídicas, ya que no está obligado a cumplir órdenes que violentan la Constitución.
“Lo que aconteció con la Asamblea Legislativa no ha quedado en el olvido y le mereció una contundente condena internacional a El Salvador y una contundente vigilancia en materia de derechos humanos y de salud democrática en el país, no es normal que un presidente de la República entre a la Asamblea con el Ejército y la Policía, se siente en la silla del presidente de la Asamblea, toque el gong y diga que tiene el control”, recordó Escobar.
Rodolfo Parker, diputado del PDC, externó que es la primera vez en la historia de El Salvador que un ministro de la Defensa militarizó el recinto legislativo “y como si nada ha pasado, no puede ser”.
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En esta ocasión y, según el subjefe de fracción del FMLN, Jorge Schafik Hándal, la interpelación de Merino Monroy sí es vinculante, a diferencia de los casos de Orellana Bendek y de Benítez.
“Si no viene puede ser hasta motivo de destitución automática, cada actitud que se vio el 9 de febrero ha continuado presente, el ataque, el maltrato, la imposición que se le quiere hacer a este Órgano de Estado, sobre todo la actitud de irrespeto total que hizo el ministro de la Defensa”, resumió Hándal.
Al respecto, el fiscal general, Raúl Melara, se refirió sobre el caso de la incursión de la Fuerza Armada en una entrevista televisiva.
“Hasta este día todas las personas que han llegado a declarar han dicho que no vio nada anormal, inclusive cuando se manifestaba que había sido una violación al protocolo de seguridad de la Asamblea, citamos en su momento al jefe de seguridad de la Asamblea y dijo que él había coordinado todo”, apuntó Melara.