La Fundación Naricitas Humedas, en Ahuachapán, no sólo debe de ingeniárselas para cubrir los gastos que requiere la atención de 157 perros, la mayoría abandonados y sometidos a algún tipo de maltrato; sino que este mes se le sumó una nueva preocupación ya que el recibo por el servicio de agua les llegó de $212.85.
La cifra contrasta con los $26.60 del mes anterior o los $7.56 de enero pasado.
“Es una injusticia que nos está afectando. Ojalá logremos resolver la situación que tenemos”, expresó uno de los fundadores de la iniciativa, Edgardo Gutiérrez.
El ahuachapaneco señaló que están conscientes de que deben cancelar por el servicio que reciben; pero que la cifra cobrada este mes, es elevada, lo que les afecta al sostenimiento del resguardo canino, ubicado en la colonia La Gloria, de la cabecera departamental.
Ya hubo un acercamiento con la Administración de Acueductos y Alcantarillados (Anda), de quienes esperan una respuesta favorable para reducir el cobro elevado.
La fundación opera desde hace dos años a través de la colaboración de personas altruistas.
La mayoría de perros que están en el albergue son de la calle y otros, sus propietarios los han abandonado en la puerta de la fundación para que esta se haga cargo del sostenimiento o tratamiento por alguna enfermedad.
“El detalle que últimamente la gente los viene a dejar al portón en condiciones deplorables. La gente cuando ya no los quiere (o) prácticamente se les enferma, lo que hacen es tirarlos a la calle”, lamentó Gutiérrez.
Mensualmente requieren, en promedio, de $900 para comprar la alimentación de los perros; pero el presupuesto para cubrir todas las necesidades, entre ellas de veterinaria, asciende a $3,000.
Actualmente tienen una deuda de más de $1,000 con una veterinaria, que brinda su apoyo, atendiendo a los perros y luego la fundación cancela.
Cada mes reciben algunas donaciones económicas de personas altruistas; pero son insuficientes para cubrir los gastos, por lo que periódicamente realizan actividades, como rifas o venta de comida, para recaudar fondos.
El próximo domingo, por ejemplo, realizarán una colecta en el parque La Concordia a partir de las 10:00 de la mañana hasta las 7:00 de la tarde. Habrá presentaciones artísticas y espectáculo de carros modificados.
“Nosotros nos encargamos de veterinaria, comida, que no les haga falta lo que más podamos darle porque sí tenemos muchas limitantes. Mantener a un refugio de 157 perros indica que son más de 157 libras de concentrado diarias los que tenemos que tener porque todos los días comen”, señaló Gutiérrez.
La fundación requiere de papel, detergente, cloro, toallas humedas, pampers y alimentación para atender a los perros que en algunos casos han sido violados, otros han sufrido atropellos o presentan algún problema físico.
Chiripa, que es una perra criolla, fue la primera en ser adoptada por la fundación cuando tenía un mes de edad.
El antiguo dueño la iba a lanzar a una barranca debido a las condiciones en que se encontraba ya que no ve con el ojo derecho y con el izquierdo está a punto de perder la visión.
Luego fueron 20 ... 30 y ahora 157 perros los que son atendidos por la fundación.
“Necesitamos de bastante apoyo”, razonó el ahuachapaneco.