A millonaria deuda para escuelas se suman $60 millones más

La Asamblea aprobó en mayo tres préstamos para distintos programas escolares por un total de $600 millones.

descripción de la imagen
Centro Escolar de Ahuachapán. FOTO EDH: Archivo

Por Eugenia Velásquez

2021-10-12 9:00:40

El ministro de Hacienda, Alejandro Zelaya, informó que de fondos propios destinarán $60 millones en el presupuesto de 2022 para reconstrucción de escuelas, a pesar de que la Asamblea aprobó en los últimos meses $600 millones en préstamos para el mismo fin con escasa información de cómo se ejecutarán.

La diputada oficialista Suecy Callejas, argumentó que la educación inicial no es obligatoria en este momento, pero ahora con las distintas leyes que la presente legislatura ha aprobado, se espera que se pueda cubrir también desde la parte pública que le compete al Ministerio de Educación e incorporar a nivel nacional aulas de kínder y parvularia que tampoco forman parte de la educación obligatoria.

“Por eso se ve que no terminamos de incorporar fondos para reconstrucción de escuelas, algunas son reconstrucción, otras de mantenimiento y otras son desde cero”, argumentó Callejas ante el anuncio del titular de Hacienda de que incorporarán $60 millones más a ese rubro.

Y es que la nueva legislatura desde que tomó posesión el 1 de mayo emprendió una carrera maratónica avalando millones de dólares en una serie de préstamos que llegaron desde el Ejecutivo, algunos incluso fueron aprobados sin mayor discusión en las comisiones de trabajo.

Lea más: Gobierno coloca $126.7 millones en Cetes y vuelve a endeudar al país

Pero en el caso específico del área de Educación, el gobierno solicitó $600 millones en créditos, los cuales ya fueron aprobados, y pese a eso el ministro de Hacienda dijo que destinarán otros $60 millones de fondos propios del gasto nacional para el próximo año.

Mientras que, por otro lado, el gobierno reduce la asignación de fondos en el presupuesto de 2022 para otras instituciones como la Procuraduría para la Defensa de los Derechos Humanos.

En mayo pasado la Asamblea Legislativa dio luz verde al financiamiento de tres proyectos educativos para los que solicitó un total de $600 millones en créditos, desglosados así: $100 millones para el Programa Mejora de la Calidad y Cobertura Educativa: Nacer, Crecer, Aprender; contratado con el Banco Interamericano de Desarrollo (BID).

Otro por $250 millones para el Proyecto Crecer y Aprender Juntos, Desarrollo Integral de la Primera Infancia en El Salvador firmado con el Banco Internacional de Reconstrucción y Fomento (BIRF); y un tercero por $250 millones para el Proyecto Creciendo Saludables Juntos, Desarrollo Integral de la Primera Infancia en El Salvador, también con el BIRF.

Sin embargo, los detalles de los préstamos no fueron aclarados a los diputados de la oposición, quiénes si bien dijeron estar de acuerdo con apoyar la educación inicial, cuestionaron la poca transparencia del uso de los recursos.

“Tenemos que hacer conciencia de que lo que vamos a ir haciendo en esta Asamblea Legislativa debemos de contar con un mínimo de información y de rendición de cuentas”, mencionó en ese entonces el diputado de ARENA, Donato Vaquerano.

Le podría interesar: Desconfianza sobre refuerzo de $4.3 millones para el OIE

Las diputadas del FMLN, Anabel Belloso y Dina Argueta no votaron por el paquete de $600 millones en deuda. Según las efemelenistas, se abstuvieron porque la bancada oficialista jamás les presentó en el pleno el contenido de los programas y por falta de claridad de la ruta de endeudamiento que lleva el dinero.

“Nuevas Ideas y aliados votaron para iniciar gestiones y endeudar al país por $600 millones. Con Dina Argueta nos hemos abstenido de votar por las siguientes razones: primero, no presentaron el contenido de los programas; dos, no hay claridad de la ruta de endeudamiento que se tiene; tres, se puede apostar a esos rubros sin necesidad de endeudarnos, a través de un ordenamiento de las finanzas públicas, cuatro, el endeudamiento sobrepasa el 90%, continuar endeudando al país, reduce la inversión en la niñez. Un buen gobierno hace un uso eficiente de los recursos”, manifestó en su momento Belloso.

Ante las críticas, la diputada Callejas salió al paso diciendo que “la inversión en primera infancia jamás será un gasto como lo quieren hacer ver, es una inversión que traerá retorno”, justificó.

Lo poco que se conoce de los programas que se ejecutarán con el dinero es que del crédito de $100 millones pretende dar atención a 850,000 niños entre cero y siete años de edad.

Se prevé que $77.4 millones sean para la mejora de la calidad y expansión de la oferta para la educación parvularia y $13.5 millones para modalidad flexible.

Continúa leyendo: “Ninguna mayoría puede pasar por encima de la Constitución”, dice candidato a CSJ a diputados

El crédito con el BIRF de $250 millones para el Proyecto Crecer y Aprender Juntos, Desarrollo Integral de la Primera Infancia en El Salvador, destina $153 millones para ambientes físicos, $47 millones para infraestructura y $32 millones para formación docente.

Y el tercero también por $250 millones es para rehabilitar la red de establecimientos de salud con servicios de salud materno infantil, hogares de espera materna y centros rurales.