USULUTÁN. Durante los primeros días de enero, el Concejo municipal de Jiquilisco, Usulután, decidió realizar la supresión de 55 plazas de trabajo en los departamento de Veterano de Guerra, Memoria Histórica, de los distritos de Tierra Blanca y San Marcos Lempa, decisión que fue tomada en vista de los resultados obtenidos de un “estudio de reingenieria administrativa”, según explicó el síndico javier Flores.
“El estudio técnico y financiero nos arroja que la comuna no puede sostener tanto personal ya que contaba con 378 empleados, está abarrotada la oficina (de empleados) sin hacer nada, la alcaldía deja (de hacer) los proyectos para pagarle a estas personas; como nueva administración sabemos que el pisto del Fodes es destinado para proyectos y se usa para pagar salarios”, explicó Flores.
Después de 9 años de trabajar en la comuna, seis de estos como Concejal, Manuel de Jesús Montesino Pineda recibió una notificación de despido y un cheque con el que no está conforme.
“Nos han querido dar un cheque que no reúne los requisitos de lo que uno tiene ganado, vamos a hacer la lucha porque tiene que existir una justificación del porque del despido, ademas de eso habemos muchos que tenemos una constancia médica donde nos hace acreedores de que estamos mal de salud, por eso tendríamos derecho a estar laborando”, alegó Pineda.
Ante la inconformidad por lo recibido en indemnización por parte del personal despedido, el síndico municipal aclaró que se trata de la primera cuota de indemnización. “Se les notifico y se les dio la primera cuota”, sostuvo, sin especificar quié día sería entregado el dinero restante.
Este sería el segundo despido que realiza la alcaldesa Loida de Pérez y su consejo municipal. El año pasado despidieron a un aproximado de 100 personas, plazas que han sido suprimidas, según el síndico.
Por ello, aseguró que en el presente año la comuna de Jiquilisco no contratará personal, ya que “estamos saturados, y para el trabajo que se desarrolla con las personas que quedan funciona bien”, apuntó Flores.