Los asaltos en las unidades del transporte de pasajeros se incrementaron en 2018, al pasar de 67 en 2017 a 70 casos, afirmaron empresarios aglutinados en la Mesa Nacional de Transporte, (AESTP).
El auge de los asaltos se ha concentrado en su mayoría en las rutas que ingresan a San Salvador, tanto departamentales (Santa Ana, Ahuachapán y Sonsonate) como de los municipios del Área Metropolitana sobre todo de Apopa, Soyapango, afirmó el representante de AESTP, René Velasco.
Velasco afirmó que estos ataques dejaron al menos 25 muertos y 35 lesionados entre asaltantes y víctimas.
Las frías cifras, dicen los transportistas, los obliga a pedirle al Gobierno más atención. “Urgimos a las autoridades, las coordinaciones con para que la población pueda movilizarse más tranquila”, dijo Velasco.
Pero no todos los transportistas ven el panorama gris en materia de asaltos armados, pues el empresario Catalino Miranda, presidente de Fecoatrans, Inversiones y Negocios, dijo que en las unidades en que se dispone del sistema de vídeo vigilancia, GPS y botón de pánico (para alertar al 911 ante un asalto), los robos han desaparecido en 90 %.
La seguridad en autobuses y microbuses tiene un alto costo económico. Miranda dijo el miércoles anterior que en 2016 habían invertido $600 mil en adquisición de plataformas digitales que ahuyenta a los delincuentes.
Según Miranda hay meses que se ha bajado el ilícito en un 99 %, es decir, que no han registrado robos de (carteras, billeteras y celulares) dentro de las unidades. Contrario a lo que sucede en las unidades que van a Soyapango, Apopa, Lourdes Colón, donde los asaltos siguen por la falta de tecnología para denunciar a los delincuentes.
Zona occidental
En esa misma dirección se expresó, Alexander Sorto, presidente de Corpotrans que recorren las rutas de Santa Ana a San Salvador, Metapán a San Salvador, de Sonsonate a San Salvador, Santa Ana a Ciudad Arce, donde dice que han invertido en el uso de tecnología dentro de las unidades y los asaltos ha disminuido en casi 50 por ciento.
“Con el uso de tecnología, el robo es un delito que está cerca de ser erradicado. En esas zonas hemos invertido en sistemas de vídeo vigilancia y eso ha permitido avanzar en materia de seguridad y tener más control”, destacó Sorto.
Agregó que eso les ha permitido avanzar al punto de que hay rutas y empresas que mueven muchas unidades y en las que solo han tenido uno o dos asaltos en el año.
En cuanto a las modalidades de los atracos, Velasco puntualizó que los delincuentes se suben a las unidades como cualquier usuario y de manera sigilosa se sientan junto a la persona que consideran lleva objetos por robar como cadenas y celulares. Luego le sacan un arma, ya sea de fuego o blanca, y le exigen sin hacer mucho ruido que le entregue las pertenencias; luego se baja, simulando que ya llegó a su destino.
La Frase
En otro modo de operar, el delincuente espera a su víctima en las paradas de buses y allí la despoja de sus pertenencias. Otros se suben a las unidades y sin esconder sus rostros alertan a los pasajeros de que son ladrones y les ordenan que saquen todo lo de valor que llevan.
Sorto dice que a las víctimas del hampa las contactan y les piden toda la información del hecho y datos personales para documentar la denuncia ante las autoridades. Esta va acompañada de la fotos o vídeos del atraco cuando las disponen.
