Video: El tradicional marquesote de la familia Chávez en San Ramón

Por 50 años, la elaboración de este pan en hornos artesanales ha sido el sustento de la familia Chávez, en San Ramón, Cuscatlán

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Fotos EDH: Jonathan Tobías

Por David Carpio

2018-09-05 1:23:28

Felícita Chávez, de 59 años, es la dueña de una de las últimas tres panaderías artesanales para la elaboración de marquesotes que aún quedan en el cantón San Pablo, del municipio de San Ramón, en Cuscatlán.

La familia Chávez se ha mantenido en el negocio del marquesote por cerca de 50 años. Fue una tía quien le enseñó a doña Felícita a elaborar esa clase de pan cuando a penas tenía 16 años, ahora, ella ha sido la encargada de enseñarle a sus cuatro hijos, a sus hermanos y sobrinos el arte del marquesote.

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“El hacer marquesotes es una satisfacción, más saber que a las personas les gusta lo que yo hago, eso es gratificante”, señaló doña Felícita Chávez.

Junto a ella trabajan en su panadería su sobrina Flor Chávez quien se encarga de separar la yema del huevo y la clara para luego ser batido y mezclado con la harina, además de barnizar con mantequilla las bandejas donde es depositada la mezcla para ser metida al horno; y su hija menor Rosalina Ángel Chávez, de 25 años, quien se encarga de batir la clara de 70 huevos que mezcladas con la harina sirven para 120 marquesotes. Al final del día ellas elaboran entre 600 a 800 porciones de este típico pan dulce.

Doña Felícita se caso a los 18 años y comenta que siempre ha vivido en el cantón San Pablo, junto a su esposo y sus cuatro hijos a quienes les ha dado sustento, ropa y estudio de la venta y elaboración del marquesote.

“A mi hija mayor le logró costear hasta el segundo año de la universidad en la carrera de enfermería, sin embargo ella prefirió dejar la carrera y continuar con el negocio del marquesote”, mencionó Doña Felícita.

En cada horneada la familia Chávez utiliza un promedio de 10 libras de azúcar, 10 libras de harina y 70 huevos, para llenar 120 bandejas queda como fruto el manjar del marquesote. Foto EDH: Jonathan Tobías.

Para la elaboración de cada marquesote la familia Chávez utiliza huevos, azúcar, harina de pan o de arroz, canela, y Chocolate; durante la preparación separan la clara del huevo con la yema, baten primero la clara, luego agregan la yema, junto con la azúcar, la harina y canela, al lograr una mezcla un poco sólida como una papilla para bebé, vierten la mezcla en bandejas de latas que ya están barnizadas con mantequilla, luego los dejan un aproximado de 10 minutos en el horno artesanal y listo.

“Quisiera que la gente viniera y aprendiera a hacer marquesotes, para que la tradición ramonenses no se pierda”, indicó Felícita Chávez, quien añadió que para realizar sus pedidos pueden hacerlo llamando al 7350-2090.

Los marquesotes de la familia Chávez ofrece variedad de sabores como chocolate, maní y coco rayado. Foto EDH: Jonathan Tobías.