Roberto Rivera Ocampo: “No se puede darle el poder total a alguien a través de tomarse las instituciones”

Después de buscar la vicepresidencia con Vamos, Roberto Rivera Ocampo busca una diputación en La Libertad con ese mismo partido, al cual define como un proyecto político serio.

En este episodio de "5 minutos #SinTantaPaja", Paolo Luers entrevista a Roberto Ocampo. En cinco minutos, conozca las propuestas y posturas de este candidato a diputado por el partido Vamos en La Libertad.

Por Paolo Lüers

2021-02-03 8:30:26

“Cinco minutos, Sin tanta paja” es un espacio de entrevistas breves y al grano que el periodista Paolo Lüers hizo a 17 candidatos a diputados por diferentes partidos. El objetivo es cortar los detalles innecesarios y ofrecer solo lo medular. Día con día, se publicará en las redes de elsalvador.com y El Diario de Hoy una entrevista diferente hasta agotar las 17 candidaturas.

Vos fuiste candidato a vicepresidente y hoy candidato a diputado. ¿Por qué la insistencia de meterte a política?

Yo creo que habemos ciudadanos interesados en el servicio público y creemos que podemos aportar a dignificar algo que hoy por hoy la ciudadanía tiene en baja estima, la Asamblea Legislativa.

Creo que hay muchos ciudadanos ahí afuera que están esperando ser representados, sobre todo los que son golpeados más frecuentemente por las leyes emitidas en la Asamblea y las políticas del Ejecutivo.

Ahora, ¿la Asamblea no es realmente representativa?

No creo, hay una gran cantidad de sectores no representados en varias décadas. Está gente que hace uso del transporte público, empleadas domésticas, micro y pequeñas empresas, los emprendedores. ¿Quién los representa?

Pero, ¿qué te lleva a pensar que un partido pequeño como Vamos puede representarlos?

Lo que pasa es que este es un proyecto político. Francamente te digo que han partidos que han surgido recientemente como “llamaradas de tuza”. Pero esos no son proyectos políticos. Son proyectos de alguien en particular y aquí en Vamos lo que estamos tratando de hacer es construir un proyecto colectivo. Cuesta más y va a ser de mediano a largo plazo, pero es a lo que yo le apuesto.

¿Hablás de la diferencia entre Vamos y Nuevas Ideas?

Así es.

Ambos hablan de renovación. ¿Es otro proceso?

La diferencia está cuando vos tenés sentado a alguien de ese partido y le preguntas cuál es su propuesta y su proyecto político, no tienen. Su única apuesta es decir que sí al presidente, apretarle el botón. 

A partir de ahí, esto en 2024 se acaba. Lo que habrá son luchas internas por el poder dado que lo van a tener. La diferencia con nosotros es que estamos tratando de construirlo con liderazgos nuevos, gente que viene de la sociedad civil de verdad y luchando por temas que son prioridad para el país: combate a la corrupción, educación, participación de las mujeres, etcétera.

Si llegas a la Asamblea, como Vamos van a ser minoritarios. ¿Con quiénes vas a hacer alianzas para tener incidencia?

Yo creo que hay varios partidos que tienen muy buenos candidatos, hay que decirlo, y vamos a buscar esas alianzas siempre y cuando estemos de acuerdo en algo. Nosotros tenemos unos pilares basados en principios y eso no lo vamos a negociar. 

Pero estoy seguro que podemos ponernos de acuerdo en tres o cuatro temas.

¿Cuáles son?

Uno es la modernización de la administración pública a través de la Ley de la Función Pública. Otro es aprobar la Ley del Agua que se viene discutiendo al menos desde hace una década. Y tres, mejorar y modernizar el transporte público, una gran necesidad en este país. Creo que podemos encontrar consenso en muchos de los partidos políticos. 

Bukele ve la gobernabilidad como control total. ¿Cuál es la gobernabilidad democrática que hay que desarrollar?

Primero, hay que empezar por algo bien básico, tenemos que llegar a la Asamblea a revisar y reformar algunas cosas que tienen que ver con el reglamento interno de la Asamblea para la elección de funcionarios de segundo grado.

Lo relaciono con la gobernabilidad porque no podés darle el poder total a alguien a través de tomarse las instituciones y las instituciones y los partidos en la Asamblea se han dado cuenta del error que han cometido de tomarse las instituciones a través de cuotas partidarias a través del reparto que han hecho. 

Eso hay que romperlo. 

No podemos tener un Tribunal Supremo Electoral donde los partidos tienen intereses porque ahí hay un conflicto. Jamás vas a ver a un Tribunal Supremo Electoral con los pantalones puestos para sancionar campaña adelantado, por ejemplo.

¿Algo para cerrar?

Mi mensaje central es que el 28 de febrero está en juego, primero, la separación de poderes que debemos defender como principio democrático, y segundo, una representación de sectores que jamás han tenido a un representante en la Asamblea Legislativa y son la mayoría.